El volante herediano Esteban Ramírez está esperando la llamada de la dirigencia del campeón nacional para negociar una renovación, el jugador desea mantenerse en el equipo de sus amores y con el que ha ganado cinco títulos nacionales.
¿La dirigencia del Herediano ya habló con usted?
No, todavía no hemos hablado, recién terminó el torneo y veremos qué pasa. Cuando digo qué pasa me refiero aquí adentro. No ha habido un acercamiento aún.
¿Su intención es renovar?
No es secreto para nadie, nunca ha sido un secreto. Esta el caso de Víctor Núñez también, no sé cual será la situación con el Mambo, pero enfocándome en la mía, no sé a qué se debe que no haya un acercamiento, aún estamos con la emoción de celebrar el título y todo eso, quizá no sea el momento para ellos. Yo estoy en toda disposición cuando sea.
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¿Qué representa este título para usted?
Mucho, si yo me pongo a repasar mi carrera, y lo digo humildemente porque así son los números, de diez años como profesional he ganado ocho títulos y eso me deja muy satisfecho.
En su momento se habló de un contrato vitalicio con el Herediano. ¿Qué pasó con eso?
En cuanto al contrato vitalicio, en aquel momento se firmó con otra administración, que era la de don Mario Sotela. En todo caso la FIFA no permite el contrato vitalicio, si no que un máximo de cinco años, los cuales en mi caso se cumplieron el domingo, ahí finalizaron esos cinco años de vínculo. Entiendo que al haberse firmado ese contrato simbólico con otra administración, la actual no tiene porqué respetarla. En aquel momento se había hablado de que cuando se venciera el plazo se renovaba igual, pero ahora estamos con otra junta directiva, la cual puede analizar la situación de la forma que ellos quieran, pero mi única intención es quedarme acá.
Usted tiene un hijo y una familia. ¿Jugaría con otro equipo por sus responsabilidades?
Lo que usted menciona del tema familiar, sé que porque en algún momento me dejé decir que si ya no jugara más con el Herediano seguramente me retiraría del fútbol o no optaría por jugar con otro equipo por algún tiempo. Eso lo dije hace unos años, pero las cosas han cambiado mucho, tengo un hijo y una familia que mantener. En aquel momento las obligaciones que tenía eran mínimas y ahora sí tengo que encargarme de mantener una familia. No es que en aquel momento hablé paja, simplemente es una razón de mucho peso que me haría cambiar y buscar oportunidades en caso de que no me renueven acá.
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¿Aceptaría una oferta del fútbol nacional?
Siempre la opción uno, dos y tres va a ser en Herediano y estaría dispuesto a esperarme los días que ellos quisieran. Mi única intención ha sido jugar acá, pero obviamente tengo que tener un plan B listo para no poner en riesgo el bienestar de mi familia.
¿Le dolería tener que irse del Herediano?
Sí, claro, con todo lo que me he dejado decir en micrófonos durante estos años. Igual todo lo que dicho no es paja, son cosas reales y de corazón. Sí me dolería, por supuesto. Además de los títulos que hemos ganado, que son cinco por dicha, hemos creado muchísimas cosas bonitas aquí adentro.
¿Siente que peleó por el Herediano dentro y fuera de la cancha?
Cuando estuvimos en una situación que parecía que había riesgo de que el club desapareciera, se crearon lazos que cuesta mucho que se rompan.
¿Le asombra la falta de acercamiento de la dirigencia?
Sí, porque el tema de mi contrato solo se habló muy por encima, una conversación de uno o dos minutos en la primera semana de enero y hasta hoy no se volvió a tocar. Yo no busqué o estuve encima porque mi intención nunca ha sido presionar, pero sí por todo lo que he pasado aquí en la institución y todo lo que hemos ganado, quizá me sorprende un poco que no se me hayan acercado de manera formal.
¿Le angustia la situación?
No siento ninguna angustía todavía, tengo fe de que todo va a salir bien, nada más me sorprende, pero no siento angustia. No hay temor, no hay preocupación todavía, simplemente me hubiera gustado que ya hubiéramos hablado.