Un error del arquero Dexter Lewis pone en vilo la clasificación manuda a las semifinales del Verano 2015.
Al minuto 89 del juego, la Liga tenía el panorama ideal para marcar la ruta a la siguiente ronda: ganaba 2-1 y Uruguay de Coronado (quinto en la tabla) perdía en el Ricardo Saprissa.
Pero una devolución a Lewis costó caro. El guardameta trató de burlar al atacante Juan Vicente Solís, falló en el amague y el balón quedó a merced del ariete para enviarla a las redes con el arco abierto.
El boleto a las semifinales ahora está empeñado. Los manudos tendrán que pelear el cupo con un Uruguay de Coronado, que mantiene su buen fútbol, y un Municipal de Pérez Zeledón que no cede en los cupos de privilegio. Además está Herediano, que llega obligado en cada juego a sumar tres puntos.
Los locales tuvieron una noche desacertada. Alajuelense no supo quitarse la camisa de fuerza impuesta por una Universidad de Costa Rica aplicada y conocedora de lo que debía hacer para frenar la ofensiva rival.
Las rutas de escape de los erizos son los costados, pero el técnico José Giaconne dobleteó esas zonas y controló a Diego Calvo y a Johan Venegas.
La fórmula obligó a los de casa a llevar el balón por el centro del campo, una área minada por Mauricio Montero y Paulo Rodríguez. Además, un desorbitado Ariel Rodríguez hacía de cómplice involuntario, fallando en reiteradas ocasiones los pases.
Con este panorama, Alajuelense no tuvo más remedio que apostar por la salida directa, sin escalas, por los aires, fácilmente controlada por la zaga rival en las alturas.
La ‘U’ encontró la recompensa de su buen trabajo al 42’: el zaguero Julio Cascante lazó con buen tino un balón en medio de Porfirio López y Johnny Acosta, para que su compañero Gutiérrez venciera al meta Dexter Lewis con un remate cruzado.
La ventaja solo duró dos minutos y el empate erizo cayó por la única vía posible: un regalo.
Cascante intentó dar un pase al centro del campo que terminó en los pies de Calvo, quien con astucia observó que el arquero Carlos Méndez corría hacia atrás y le remató de seguido.
Los liguistas mejoraron y el ingreso de José Guillermo Ortiz refrescó una ofensiva que parecía no pensar con claridad.
El atacante lanzó un centro que logró impactar de un cabezazo Jonathan McDonald, al 77’.
Después de ahí, los locales manejaron el juego, tres puntos que daban confianza para la clasificación. Sin embargó, cayó lo inesperado con Lewis.
La mala suerte visita a la Liga al final de un juego por segunda ocasión consecutiva.