Casas aumenta la lista de pifias en el Saprissa

La renuncia de Daniel Casas al banquillo morado significó la segunda pifia en la gestión de Horizonte Morado por armar un proceso en busca del título.

El uruguayo se convirtió ayer en otra apuesta fallida de la nueva dirigencia morada, que una vez más deberá volcarse al mercado en busca de un técnico.

Contrario a Alexandre Guimaraes (separado del cargo luego de dos torneos sin ningún cetro), Casas decidió hacerse a un lado y cumplir con la promesa que había lanzado a inicios de temporada.

En aquella oportunidad, el estratega aseguró que si no superaba lo hecho por sus antecesores, dejaría el cargo, y eso hizo.

“No voy a traicionar mis principios morales ni cómo vivo. Dije que si no llegaba a la final me iba y así es, mi cuota de responsabilidad puede ser grande o pequeña, no sé, pero es mi sentir...”, aseveró.

El timonel, sin embargo, también reconoció que su decisión llegó impulsada por esas palabras, de las que dijo posiblemente se arrepiente por hacerlas públicas.

Juan Carlos Rojas, presidente tibaseño, se resistió a responder si la dirigencia habría mantenido al charrúa en su cargo en caso de que hubiera querido continuar, y solo atinó a agradecerle su trabajo.

Tropiezo. El cambio, sea como sea, llega a poner un nuevo alto en un proceso que sigue sin cuajar.

Año y medio después, Horizonte Morado continua haciendo borradores para dar con un cuerpo técnico que encamine a su equipo hacia el ansiado “30” y más allá.

El de Casas es hasta ahora el capítulo más corto en esta nueva era. Su gestión se extendió solo por lo que duró el Invierno, pese a que llegó con un contrato de dos años.

Al charrúa se le criticó desde un principio su falta de experiencia en equipos “tradicionales” y la ausencia de un pasado saprissista, pero sobretodo la inconsistencia que exhibió su equipo en el certamen.

Su desempeño, si bien no fue malo, tampoco inspiró la confianza necesaria en la afición, aun con ese segundo lugar en la general, un espejismo que Herediano se encargó de esclarecer el domingo anterior.

Crisis. Pero la renuncia de Casas fue apenas la punta de un iceberg que otra vez golpeó a Saprissa.

Junto a él, la directiva anunció las salidas de Juan Manuel Morales y Ricardo Costa por bajo rendimiento. Tampoco seguirá Víctor Bolívar por su “indisciplina y falta de compromiso” con la institución, una salida que ya se había anunciado sin el cobijo de la oficialidad.

Finalmente, César Elizondo no será renovado pero por decisión propia, pues el delantero probará suerte en el futbol de Tailandia el próximo año.

Todas esas salidas llegan apenas con el primer remezón de una crisis que una vez más ahoga a la S, la tercera con Horizonte Morado.