Cartago. El triunfo logrado ayer ante Belén, fue una bocanada de aire para el Cartaginés, después de una semana turbulenta que inició con la caída estrepitosa de 4-0 ante Alajuelense.
El mismo técnico brumoso, Javier Delgado, lo reconoció una vez concluido el juego.
“Este partido había que ganarlo, sí o sí, aunque sigo buscando la alineación que me rinda más, las variantes que hice en este partido, me respondieron bien”, aseguró.
La victoria, aparte de acercar a los blanquiazules a la zona de clasificación del Torneo de Invierno, también es una motivación extra para el duelo del próximo miércoles, ante el Galaxy, por la Concachampions.
“Es un partido que debemos ganar, al menos por dos goles de diferencia, es la única manera de seguir con posibilidades de pasar a la otra fase”, destacó.
La importancia de ese encuentro es tal, que ni Delgado ni los jugadores quieren hablar del Saprissa (su rival del domingo), hasta no haberse medido con los angelinos.
Cambio. Un hecho inusual se presentó con el cuarteto arbitral de ayer, pues en primera instancia, la Comisión de Arbitraje había designado a Oswaldo Luna como guardalínea, pero una gestión del Cartaginés hizo que se revocara ese nombramiento.
“Mandamos una carta el viernes anterior a la Comisión, diciéndoles que no podíamos garantizar la seguridad de ese árbitro, porque todavía nuestra afición, no le ha perdonado a él, ni a Randall Poveda, su actuar en el partido de la final contra Herediano”, explicó el vicepresidente brumoso, Carlos Loría.
Por su parte, el portero Luis Fernando Torres, calificado por la Unafut como el mejor arquero del torneo anterior, debutó ayer en el presente certamen.
“Con Wardy tengo buena amistad y la competencia es leal, hoy me tocó a mí, y agradezco el recibimiento que me hizo la afición, lo que le da a uno mayor confianza”.
El turrialbeño dice comprender la dura semana que viene para Cartaginés. “Si sigo de titular, me prodigaré para sacar los resultados”.