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Carlos Saucedo dedicó su anotación ante Alajuelense a los familiares de un hombre fallecido en Tibás. (José Rivera)
El boliviano Carlos Saucedo se posicionó frente a Patrick Pemberton y limpió el sudor de su rostro, mientras pensaba en un episodio que no borrará de su cabeza, cuando recuerde su paso por Costa Rica.
El delantero concretó el segundo gol de los tres propinados por el Saprissa en el clásico nacional al Alajuelense, por la vía del penal, y antes de disfrutar de la euforia morada, Saucedo se arrodilló a orillas de la cancha y dedicó su anotación a Michael Salazar Molina, con sus manos alzadas hacia el cielo.
Saucedo fue testigo del accidente de tránsito ocurrido este viernes en las afueras del estadio Ricardo Saprissa, en el que falleció Salazar, quien fue colisionado por un vehículo cuando conducía su motocicleta.
"Quería compartirlo con la familia, hubo un accidente en la esquina del estadio, yo lo vi y me dolió mucho ver, y se me vinieron muchas cosas a la mente. A veces uno sale de su casa y quizás no puede regresar. Quería dedicárselo especialmente a la familia de él y por eso fue la celebración de esa manera", dijo el sudamericano.
Antes de referirse al buen juego morado de este sábado, el ariete lamentó el accidente y envió sus condolencias a los allegados del hombre de 38 años, quien fue declarado sin vida al presentar lesiones internas severas y múltiples traumas.
Carlos Saucedo acumula cinco goles con la camiseta del Saprissa.
