Cancha colapsó con tanta agua

Corría el minuto 79, cuando la gramilla del reducto ya no pudo más con las precipitaciones.

Antes del inicio del juego, el partido estuvo a punto de posponerse debido a un aguacero que se apaciguó unos 20 minutos antes de las 4 p. m., lo cual permitió que el drenaje cumpliera su labor.

Durante el descanso se volvió a presentar otra fuerte lluvia, pero no duró mucho y mientras los equipos salían a la cancha, el terreno logró drenar el agua una vez más, para continuar con el juego.

Sin embargo, al cierre del cotejo, la cancha no resistió y Quirós se vio forzado a suspender el juego de forma momentánea.

Algunas zonas de la gramilla mostraron enormes pozos de agua acumulada que imposibilitaron el buen desplazamiento del balón.

Además, el cuerpo arbitral prefirió velar por la integridad física de los protagonistas y evitar cualquier inconveniente.

Pese a la lluvia, los aficionados se mantuvieron firmes en las gradas y a la espera de un triunfo del cuadro local, que nunca llegó.