En los rostros cabizbajos que muestran los futbolistas rojiamarillos mientras caminan por la zona mixta, se percibe el sinsabor que dejó el empate en casa frente a los guapileños.
Unos minutos antes en el camerino, a pocos metros de distancia de la zona mixta, se escuchaban los gritos, los reclamos y la evidente molestia por lo sucedido en el campo.
Luego vino la resignación y posteriormente un claro discurso, que se repitió en la mayoría de voces florenses: Si Herediano quiere ser campeón, debe recuperar los puntos en el Estadio Ricardo Saprissa.
“Tenemos equipo para ir a ganar al Saprissa. Tenemos que levantar la cabeza. Si no pensamos así, mejor nos retiramos y no jugamos la cuadrangular”, dijo el delantero Jairo Arrieta.
En la anterior visita, el Team cayó 2 por 0 en la casa morada.
Según datos de Gerardo Coto Cover, en los últimos seis torneos Herediano jugó nueve veces en Tibás; tuvo ocho caídas y un empate, en Invierno 2015.
Aunque los futbolistas admiten que el desempeño del club en la campaña ha sido irregular, también aseguran que el grupo ha mostrado carácter para sobreponerse a la adversidad.
Herediano afrontará tres visitas consecutivas (Saprissa, Limón y Santos) que lo podrían colocar en una buena posición para buscar el boleto a la final o, por el contrario, hundirlo y alejarlo de la lucha por el título.
El primer paso será visitar el campo del líder, sin su principal figura, Elías Aguilar, y con la resaca de un deslucido empate.
“Herediano está obligado a ir allá (Tibás) a recuperarse. Saprissa es el favorito, es el campeón, quedó en primer lugar. Tenemos que redoblar esfuerzos si queremos ir a ganar allá”, explicó el defensor Pablo Salazar.
Del análisis que realizan los referentes del Team , se sacan algunas conclusiones.
Primero, que deben ser contundentes y aprovechar las ocasiones de gol, contrario a lo que sucedió frente a los santistas.
En el cotejo del sábado, los guapileños cedieron la iniciativa, pero mantuvieron un bloque firme que disminuyó las intenciones florenses de generaciones opciones de peligro.
En Herediano también son autocríticos, en el sentido de que no basta con tener la pelota, sino que les falta más profundidad en el último cuarto.
De las principales fortalezas que tiene el Monstruo, apuntan el desequilibrio de Daniel Colindres en ataque.
“Es importante tener la fineza para concretar las opciones en el Saprissa”, recalcó el volante Rándall Azofeifa.