Cartago. Cartaginés blindó su entrenamiento de ayer en la previa ante Alajuelense, dejando entrever que más que sentirse tranquilo por estar clasificado, asegurar la segunda posición del certamen es una especie de “compromiso” con su afición.
Se miente si se dice que en el camerino blanquiazul hay alegría por los alrededores pues, si bien es cierto que está en semifinales, los tres últimos partidos en casa, lejos de respaldarlo, hicieron que la afición dudara más de la cuenta; los propios jugadores lo toman así.
“El juego del domingo es importante pues para mucha gente somos duda y no somos el cuadro de antes, entonces yo creo que a nosotros un triunfo nos va a devolver la confianza y nos dará un aire nuevo para lo que serán las semifinales –comienzan el miércoles–”, expresó Pablo Brenes.
El discurso de los jugadores y el cuerpo técnico es el mismo: nada de bajar los brazos, no está permitido ilusionarse de momento y debe entenderse, ante todo, que se ha quedado mal con la afición.
Ellos evitan pronunciar la palabra presión, aunque saben que no hay mejor forma de lavarse la cara en su estadio que dejando fuera al actual campeón nacional.
“Ya no se puede perder más en nuestra casa. Nosotros primero priorizamos nuestra necesidad de ganar el domingo por ratificar el segundo lugar y por quitarnos esa racha sin ganar en casa. Por añadidura, dejar fuera al campeón Alajuelense”, dijo el director técnico, Javier Delgado, ayer por la tarde.
El estratega blanquiazul fue claro en afirmar que prefieren a una Liga “muerta” desde ahora que encontrársela en la fase final.
Ensayo. Pero el juego ante los manudos también tiene otro panorama, ya que es visto como un ensayo de lo que encontrarán en semifinales a partir del próximo miércoles.
“El ambiente que veremos el domingo será el de semifinales pues ellos se van a venir a jugar el campeonato acá y nosotros no queremos regalar más en nuestra casa, tenemos que dar un golpe de autoridad”, explicó Félix Montoya.
Como forma de incentivar al público y de relajación propia, el cuerpo técnico y los jugadores disfrutaron de una actividad de firma de autógrafos y convivio con los aficionados en Paseo Metrópoli.