Álvaro Saborío, pese a que no jugó ni fue convocado, reafirmó su posición como el inamovible ‘9’ de la Selección Nacional.
El partido en República Dominicana mostró que no hay competencia para el ariete al frente de la Tricolor . Ya se sabía que Sabo es titular indiscutible, pero era de esperar que alguien le hiciera sudar un poco más por el campo.
Si bien los jugadores probados por Jorge Luis Pinto cumplieron en el experimento, abrieron espacios e hicieron asistencias, carecieron del combustible esencial de un delantero: el gol.
Yendrick Ruiz, Jonathan McDonald, Víctor Núñez..., ninguno aprovechó del todo la oportunidad ni las libertades que se les brindaron ante un débil rival, como fueron anoche los caribeños.
Se rescatan la asistencias de Yendrick y Mambo, pero eso no es suficiente para garantizarles el llamado cuando hablemos de eliminatorias y, específicamente, del crucial juego contra Estados Unidos, del 6 de setiembre.
“Lo importante es que, al final, juego un rato. Poco a poco puedo ir demostrando un poquito más”, comentó Núñez después del partido.
Preocupante, porque si Saborío llega con la pólvora mojada, como ya le pasó en la Copa de Oro, no existe ese delantero capaz de ingresar y cambiarle la historia al encuentro.
Único hombre gol. Con siete anotaciones en las eliminatorias, Álvaro es la única garantía en el área que tiene la Selección Nacional.
Hay que rebuscar hasta encontrar a Celso Borges, Randall Brenes, Bryan Ruiz y Joel Campbell como los únicos jugadores nacionales que han repetido con el gol en todo el camino eliminatorio.
Lo bueno, si se quiere ver de forma positiva, es que se reactiva la participación de los volantes en ofensiva, con un ataque compacto.
El mismo Borges, con sus dos dianas, confirmó que está en un buen momento y continúa con lo mostrado en Copa de Oro y la Hexagonal. Aún está fresco el recuerdo del trallazo que le anotó a Panamá.
Otros experimentos. Ayer Pinto no escondió mucho, salió con el cuadro titular de la Sele y puso a prueba a pocos jugadores.
Yendrick y McDonald no pasaron con la mejor nota su prueba.
“No sé si me gané el lugar. Sé que estoy en desventaja por el tiempo que han tenido los otros”, aclaró muy fácilmente McDonald.
El otro fue Óscar Duarte, quien no sufrió ante un rival inferior pero la tiene difícil para ganarse el campo en una retaguardia tricolor que ha cumplido muy bien.
Los que entraron de cambio aprovecharon sus pocos minutos para lucirse y, al menos, meterse en la discusión de las convocatorias.
Pablo Herrera lo hizo con gol, movilidad y velocidad. Sus características seguramente serán tomadas en cuenta para el futuro.
“Lo hemos venido viendo en su equipo, nos aportó mucho. Tenemos identificado que aporta cosas importantes”, comentó Pinto.