Si no toda, una buena cuota del peso por la decapitación del DT de Pérez Zeledón, Juan Eugenio Jiménez, se debió a nefastos fallos arbitrales.
El domingo 16 de agosto, PZ vencía 2 a 3 al Uruguay en Coronado, pero al 76’ los jueces decretaron como gol local un balón que picó sobre la línea. La desmoralización se apoderó de los visitantes, que terminaron perdiendo 4-3. Una semana más tarde, le invalidaron no uno, sino dos tantos legítimos ante Saprissa, ambos por inexistentes fueras de juego.
Para colmos, en jugadas dudosas, de interpretación, las decisiones tampoco le favorecieron. Para muestra, el primer penal del domingo pasado, contra la UCR, cuando la bola pegó accidentalmente en el brazo de José Garro. El juez sentenció penal por supuesta posición irregular de la extremidad.
Fue el 0 a 2 cuando los sureños parecían próximos al 1 a 1.
Así rodó la cabeza del colombiano, con solo 2 puntos de 21 disputados. ¿Lo habrían despedido si la cosecha fuese de 8, 9 o más puntos? Quizás no. Empero, no todo fue culpa de los árbitros. PZ también mostró grandes debilidades, entre ellas, la mental, al automatizar la siguiente secuencia: error arbitral = derrumbe futbolístico.
Pérez no ha sido la única víctima. Al Saprissa le robaron un penal ante Santos (2-2) y al Cartaginés, en cambio, le castigaron con penas máximas en Limón (errónea) y Heredia (polémica), 2-2 y 2-0, respectivamente, pero lo beneficiaron como local, con gol ilegítimo sobre Belén (2-1) y anotación mal anulada a Carmelita (1-1).
El florense Kenny Cunningham celebró luego de bajar el balón con la mano frente al Uruguay (0 a 1), pero le invalidaron un tanto legal contra la UCR; por añadidura, los celestes triunfaron 2-1 con anotación en fuera de juego. ¿Seguimos? Uruguay le anotó a la S en off side (2-0); el liberiano Elías Palma fue derribado dentro del área belemita sin sanción (1-1), y esas son solo algunas imágenes guardadas en la memoria del suscrito. ¿Son o no demasiadas y muy significativas para tan pocas fechas?
Titánica tarea tiene el nuevo Comité Director de la Fedefútbol, cuyo vicepresidente, Sergio Hidalgo, adelantó que la Real Federación Española auxiliaría a la tica con capacitaciones. Mientras tanto, los técnicos se persignan.