En el pulso táctico, Oscar Machillo Ramírez le ganó a Jorge Luis Pinto, porque el empate de visita les sabe a miel a los ticos. Y a los catrachos a hiel.
De arranque, los dos técnicos presentaron variantes. Pinto modificó sus 5-2-2-1 tradicional por una línea de cuatro y dos puntas. Evidentemente, después de caer en casa ante Panamá, no podía dejar ir un solo punto más en Honduras.
Ramírez, por su parte, sorprendió con cinco pares de piernas frescas con respecto al cuadro que perdió en México. Salieron del césped Acosta (sancionado), Calvo, Matarrita, Bolaños y Venegas. Ingresaron Waston, Umaña, Oviedo, Campbell y Ureña.
Y arrancó la contienda. Tensa. Emocional. La tribuna, no tan metida. Más bien concentrada. Y comenzó mejor la Tricolor. Pinto sudaba mares, en su cara se reflejaba gran angustia cuando Costa Rica, aprovechando los espacios, fallaba una, otra y otra vez de cara al arco catracho (Bryan, Celso, Ureña, Waston); por eso, el colombiano festejó tanto, tantísimo, el gol del "Choco" Lozano, al 35', que le puso las piezas del ajedrez donde le gustan. Y, ahora sí, la hinchada se metió.
Ahora, el obligado a salir era Costa Rica. En un acto tan reflejo como la piel de gallina cuando hace frío, Honduras se replegó y al "Machillo" no le quedó más remedio que arriesgar. Así, el central Umaña le cedió su lugar al contención David Guzmán y Cristian Bolaños, extremo ofensivo, reemplazó al volante mixto Randall Azofeifa.
Sin demasiada claridad, más por insistencia que por funcionamiento, llegó el tiro de esquina salvador, al 68'. Fue allí que apareció la magia de Bolaños, capaz de colocar la bola arriba, imposible para los zagueros, pero posible para el 1,96 de Kendall Waston, cuyo salto atravesó las nubes para asestar un cabezazo que convirtió a Donnis en piedra. Golazo.
Ahora, Costa Rica sacaba petróleo del Morazán, su cuarta unidad de visitante, mientras que Honduras se hundía con solo cuatro puntillos de nueve disputados en casa, faltándole escasos dos cotejos en San Pedro Sula. Y así terminó, con el "fuera Pinto, fuera Pinto", retumbando desde las gradas. En eliminatorias cuentan tanto los puntos propios como los que dejan de extraer los rivales. Y la "H", con cuatro puntos de 12 disputados y tres partidos en casa atrás, queda seriamente comprometida. Súmele el revés 6-0 en Estados Unidos. En cambio, Costa Rica suma 7, pero con tres partidos fuera del Estadio Nacional, donde le restan cuatro desafíos. ¡Una buena foja!
Por eso, lo reafirmamos: 1 a 1... ganó Costa Rica.