Orlando, Florida
Paraguay no fue el único que le puso las cosas difíciles a Costa Rica; el intenso calor en Orlando desgastó a los seleccionados. Al momento del juego, la temperatura era de 38° Celsius aunque la sensación térmica era mayor. Además, la humedad era del 52%, según datos del Servicio Meteorológico Nacional de los Estados Unidos.
Jugadores de la Tricolor aseguraron que la alta temperatura los perjudicó, pues les generó mucho desgaste físico.
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"Hubo que medirse mucho, tanto así que ninguno de los dos equipos tuvo tantas opciones de gol. Creo que el calor afectó el espectáculo. Por el desgaste físico, creo que me estaba acalambrando después del minuto 70, entonces era mejor que entrara un jugador más fresco", explicó el capitán Bryan Ruiz, quien reveló que pidió el cambio.
Joel Campbell, quien dijo ser uno de los más afectados por la temperatura, aseguró que no pudieron tener el ritmo que querían.
"El clima estuvo muy pesado y no dio para lo que deseábamos hacer, que era tener un poquito más de intensidad", expresó el volante.
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El defensor Johnny Acosta dijo que esperan estar recuperados para el martes, día en que la Tricolor se enfrente a la selección de Estados Unidos, a las 6 p. m.
"Tal vez el clima nos puede pasar factura, pero creo que si descansamos, nos alimentamos e hidratamos bien, podemos recuperarnos", finalizó el zaguero.
El martes en Chicago, donde se disputará el juego ante Estados Unidos, los seleccionados se enfrentarán a una situación muy diferente, ya que el pronóstico es que la temperatura será de 13° Celsius.
El último partido de la Sele en la primera fase será el próximo sábado ante Colombia, en Houston, con 24°.