Erick Cole, vicepresidente de giras internaciones de Monster Jam, atendió una llamada de un tico llamado Manrique Mata.
Cole, quien recibe muchas llamadas de promotores de todo el mundo, no sabía si traer el Monster Jam a Costa Rica, pero accedió en conocer a Mata, y le dijo: “vamos a tener un show en Holanda; si quiere vaya y hablamos”.
Cuando Cole llegó a Amsterdan, se dio cuenta que Mata sí estaba interesado al verlo llegar y fue así, después de pasar un fin de semana negociando, que Cole accedió venir a suelo tico para ver lo que le ofrecía RPM TV, la empresa de Mata.
“Vine con varios compañeros y vimos el XKnights (competencia de freestyle en motocicleta que se hace en el Saprissa). Fue impresionante. Vimos la cantidad de gente, la organización y en el avión de vuelta a Estados Unidos tomamos la decisión de traer el show”, recordó Cole ayer por la tarde.
Desde que Monster Jam visitó el país por primera vez, hace cinco años, los dueños del torneo dicen estar satisfechos, y aseguran que los gigantes seguirán viniendo.
“A los ticos les encanta el show. En Chicago, donde estamos, recibimos muchos correos de gente de acá preguntándonos si volveremos y cuáles camiones vamos a traer. Este mercado es muy importante”, apuntó Cole, quien aseguró que casi nunca acepta invitaciones como la que hizo Mata.