Redacción
En una vuelta ciclística en El Salvador y después de ganar tres etapas, José Luis El Negro Sánchez se ganó una bicicleta; sin embargo, era muy pequeña para su estatura, por lo que hizo un trueque con un señor que vendía bicicletas y fue así como adquirió a la compañera de viaje para ganar la primera Vuelta a Costa Rica, en 1965.
"Lo recuerdo muy bien. La pude cambiar con él para así tener un marco adecuado", comentó Sánchez en medio de fotografías que guarda en su casa como memorias que nunca olvidará.
La marca original de la bici es Quetzal, de color dorado, pero ahora solo conserva el marco con un tono verde y con una calcomanía de la marca Rudge.
"Cuando fui entrenador yo les prestaba mis bicis a los muchachos, entonces me fui quedando sin nada de accesorios o bien ellos le hacían modificaciones", dijo entre risas.
La rigidez, el peso, y la poca posibilidad para hacer cambios, así como las limitaciones de un uniforme caliente, un casco sin protección y zapatos de cuero, eran normales para la época, pero sumamente primitivos para el abanico de opciones que tiene un pedalista hoy en día.
La tecnología está a favor del deportista. Eso lo demuestra la bicicleta Giant que utilizará el equipo de la Junta de Protección Social en la Vuelta a Costa, que inicia el 17 de diciembre.
Con cableado de cambios y frenos interno, un asiento más adecuado a la forma del cuerpo, un marco hecho de fibra de carbono y con un peso de 7,6 kilos, se muestra tan solo una síntesis de la evolución que ha tenido la bici tras el primer giro tico.