San Isidro de El General. José Cachí Vega se convirtió en el primer campeón de la presente edición de la Vuelta a Costa Rica al acaparar por adelantado el premio de las fugaces metas volantes.
El hombre de JPS-Giant culminó en el Circuito Presidente el esfuerzo de ocho jornadas con la victoria de la especialidad, por lo que ahora su objetivo será cuidarse para cruzar la meta final.
“Estoy muy contento, para eso he trabajado todo el año y aquí está el premio a todo ese sacrificio. Ahora lo que queda es apoyar a Juan Carlos (Rojas) y tener cuidado en las bajadas por una caída”, afirmó Vega tras la etapa de ayer.
Y es que con 12 puntos de ventaja sobre Enrique Artavia (su más cercano perseguidor), las dos metas de hoy (últimas de la Vuelta) en nada comprometen su liderato, por lo que ahora la única forma de que pierda la corona sería quedar fuera de competencia.
“Quedar fuera de tiempo la verdad no me preocupa, hoy (ayer) estuve bien, ahora lo único es cuidarse y descansar, asegurarme de permanecer en carrera, que es lo único que necesito”, afirmó el corredor.
Circunstancias. Según Vega, las metas intermedias nunca fueron un objetivo planificado de antemano por él o su equipo, sino más bien un resultado circunstancial de los días de competencia.
“La verdad es que llegaron por circunstancias de carrera, tuvimos los puntos y los supimos cuidar y aprovechar”, finalizó.
La pelea de las metas volantes se traducirá ahora sencillamente en determinar si será Quique Artavia (25 puntos) el segundo de la clasificación o bien si el guatemalteco Julio Padilla (23) lo podrá relevar en la clasificación.
Sin esa disputa en el panorama, serán los escaladores quienes muevan el pelotón de ahora en adelante, una corona aún sin un dueño permanente.
Hoy se disputará el penúltimo premio de montaña de la Vuelta, un puerto de primera categoría en el Alto de San Juan.