Ciprelli, que estaba detenido desde el miércoles por la mañana, fue puesto en libertado bajo control judicial, por lo que queda suspendido de sus funciones de entrenador profesional y tendrá que pedir una autorización si quiere salir de Francia.
El marido de Longo, una de las figuras del ciclismo femenino en Francia, fue imputado por infracción al código de la salud y al código de aduanas porque el EPO fue comprado en Turquía.
“Durante tres años compró EPO por valor de 1.500 euros. No es una cantidad que pueda servir para dopar a un purasangre o a un deportista de alto nivel”, dijo su abogado a la salida del tribunal de Grenoble, y aseguró que Jeannie Longo no está implicada en el caso.
Ciprelli, quien primero había negado los hechos, reconoció ayer haber comprado EPO para su uso personal que según su abogado usaba como reconstituyente muscular tras haber sufrido varios accidentes de bicicleta.