La lituana Inga Clavinaite, del europeo Pasta Zara, se dejó la cuarta etapa de la Vuelta Femenina a Costa Rica , la penúltima de la prueba y que de nuevo acabó con la colombiana Lorena Vargas como líder.
Clavinaite, quien ya había ganado la contrarreloj individual en Puntarenas, el viernes, fue también la mejor en el recorrido de ayer entre Heredia y Grecia al completar los 84,14 kilómetros en 2 horas, 22 minutos y 44 segundos.
La lituana marchó en la cabeza de la competencia desde el kilómetro 50, a la altura de San Ramón, y desde ahí le imprimió un fuerte ritmo al resto del pelotón.
Detrás de ella conformaron el bloque perseguidor la salvadoreña Evelyn García, la estadounidense Addysson Albershard, la española Belén López, la bicampeona tica Edith Guillén y la propia Vargas, quien cuidó de cerca sus intereses.
Al final, el segundo lugar fue para López, quien estuvo a solo tres segundos de arrebatarle la fracción a Clavinaite.
Las otras cuatro corredoras cruzaron la meta a 37 segundos de diferencia.
De esta forma, Vargas llegó al cierre de la Vuelta con la camiseta lila, a 22 segundos de la lituana y 39 de la también bicampeona García.
En el bando tico, la campeona defensora, Edith Guillén, escaló cuatro casillas en la general hasta la sexta posición, pero se mantuvo a 3:43 de la cabeza de la tabla.
La otra bicampeona, Adriana Rojas, se desplomó hasta la posición 18, a 15:43 de la líder.
Así, las esperanzas de defensa costarricense se enfocan en Guillén, aunque con esa distancia y el nivel que han demostrado las extranjeras es difícil pensar en el milagro de cara al cierre.
Hoy la Vuelta Femenina tendrá su despedida con un circuito de 73,16 kilómetros en La Sabana, que incluirá además la disputa de las últimas tres metas volantes.