José Adrián Bonilla no se ve revalidando el título de la Vuelta Ciclística a Costa Rica. La fractura en la clavícula, cree él, lo aleja de la posición de capo del equipo Coopenae Economy Gallo.
Es optimista: espera que el jueves la valoración médica le dé para arriesgarse a subirse a la bicicleta y correr la clásica de diciembre.
El doctor que operó ayer en la mañana a Champulón, Jaime Ulloa, ya le advirtió que debería esperar dos meses para asegurarse que el hueso –al que se le colocó una placa de titanio de 10 centímetros y unos 10 tornillos para ayudarlo a soldar– sane correctamente.
“Si corre lo hace bajo su propio riesgo de que se caiga y no se sane la fractura”, sentenció Ulloa.
Aún así no todo fueron malas noticias. Ayer parecía que no había fractura en las costillas y eso ayudaría a que se acelere el regreso de Bonilla a los pedales.
El ciclista oriundo de Paraíso de Cartago, ganador de la Vuelta en 2003 y 2011, se lesionó tras una aparatosa caída el sábado en la sétima etapa de la Vuelta al Mundo Maya, en Guatemala.
Bonilla dijo ayer que la recuperación le hará perder ritmo y por eso no se consideraría como el capo de Coopenae. Si participa, lo hará como peón para Marconi Durán.
“Si corro la Vuelta es porque me siento en condiciones de terminarla; pero cómo que voy a ir y que voy a exigirles (a mis compañeros) que porqué yo gané el año pasado tengan que trabajar para mí, para nada. O sea...”, comentó Champu.
El pedalista dijo que antes del accidente se sentía en buenas condiciones para pelear por mantener el título de la máxima competencia de ciclismo en Tiquicia, pero que la lesión le alejaba de esa posibilidad.
El plan con “B” de Brenes. La lesión de Bonilla se suma a una serie de tragedias que asolaron a Coopenae este año.
Josué González ya estaba descartado por dar positivo en dopaje en la edición anterior.
Luego fue la lamentable noticia de Henry Raabe: en mayo se supo que el también bicampeón de la Vuelta a Costa Rica padece cáncer y aún continúa en la lucha contra la enfermedad.
Finalmente se da lo de Bonilla.
Así que un posible plan para salvar la temporada sería repatriar a Gregory Brenes, pero el panorama está lleno de nublados.
Daniel Muñiz, director deportivo de Coopenae, aseguró ayer que el equipo esta de manos atadas, debido a que no puede intervenir en la negociación, de acuerdo a ciertas reglas del ciclismo internacional: “Es bastante complicado”.
Al tico le queda un año de contrato con el equipo continental de Movistar; mas, en diciembre, ese equipo dejará de existir.
El ciclista intenta obtener la libertad a tiempo para correr la Vuelta, pero sin perder la indemnización que debería darle la marca.
Muñiz dijo que las reglas le impide a Coopenae hacer alguna oferta hasta enero.
Sin embargo, Muñiz fue menos pesimista respecto a los chances de Bonilla para revalidar el título.
“Todavía estamos a más de 20 días para que empiece la Vuelta. Todavía hay bastante tiempo”, comentó Muñiz.