¿Cuánto limita el tener a Alejandro Valverde en el equipo debido a que él va a ser el líder y ustedes trabajarán en su favor?
La verdad que no es limitante; al contrario, es un aliciente poder tener un compañero como Alejandro. No todos pueden contar que fueron compañeros de Alejandro, él es una garantía, es un ciclista totalmente hecho.
Esta es una buena oportunidad, esto requiere de mucha concentración y conlleva muchísimo stress y responsabilidad... Tener a un compañero como él nos exige muchísimo, siempre hay que dar el 100 %.
“A las carreras nunca se va a participar, sino a dar lo mejor.
¿Qué significa ser tomado en cuenta otra vez para la carrera más importante del mundo?
Para mí es un orgullo poder estar otra vez compitiendo. La experiencia del Tour de Francia hace dos años no fue la mejor, pero aprendí muchísimo y tengo esta nueva oportunidad para demostrar. Ojalá que todo nos salga bien y tener a punto el factor suerte que, aunque suene pesimista, a veces es importante: en esto a veces se hacen las cosas bien y por un segundo se viene todo abajo.
¿Cuál será su papel en el Tour?
Es muy claro: estar a disposición del equipo e ir día a día con las órdenes de los entrenadores. Vamos con un gran líder.
¿Habrá alguna sorpresa o ataque por parte suyo, se ha hablado de ese tema con el director?
Si se puede, y me dan la oportunidad dentro del equipo, por supuesto, ojalá lo pudiera hacer; todo es siempre con las órdenes de estar arriba, esto es un equipo, no corro solo, siempre están por encima las instrucciones de carrera.
¿Movistar es favorito para ganar el Tour?
Vamos a dar muchísimo de qué hablar. Sí lo veo como un equipo favorito: es un equipo combativo y un orgullo para todos, es una gran responsabilidad.
¿Cómo ve el recorrido?
Durísimo, desde las primeras etapas se inicia con tensión. Según lo que se dice son las etapas de colocación. Hay que ir atentos para no ver cortes, Alejandro no puede perder segundos por un descuido nuestro. El cuarto día viene la contrarreloj por equipos que es una responsabilidad, el Tour no se puede ganar en un día, pero sí perderlo.