San Rafael de Alajuela. Jorge Luis Pinto muestra por todo lado que es un hombre de coraza dura y de carácter bravo y fuerte.
No obstante, ayer cuando se oficializó en una conferencia de prensa en las instalaciones de Proyecto Gol que el delantero Álvaro Saborío quedó fuera de Brasil 2014 , casi se quiebra.
Por poco cede ante el dolor de perder a uno de esos pupilos que recogió hace casi tres años, seguro porque fueron quienes le ayudaron a cumplir su gran sueño de ir a un Mundial.
Tres angustiosas pausas en su discurso reflejaron la pena ante la cruel lesión de quien no solo es un valioso futbolista, sino un líder en el camerino, un luchador.
“Después de oír el dictamen de los médicos y conversar con el jugador, hay que aceptar la realidad. Si bien la lesión no es grave, es de cuidado. Hay que aceptar que no va a estar en el Mundial”. Ahí se detuvo la primera vez.
“Esperamos que se recupere, que ya de otra manera esté con nosotros allá (en Brasil)”. El timonel puso de nuevo el freno.
“Ojalá que futbolísticamente lo podamos remplazar, pero no va a ser fácil”. Hizo una tercera pausa, más larga y luego arrancó con la voz cerca de romperse.
“Miraremos el futuro. Nos duele por él, es un hombre extraordinario”. El duro y bravo cafetero no pudo más, tuvo que dejar el micrófono antes de ser presa de uno de los impulsos más humanos que existen.
Pinto más adelante diría, reiterado por el médico de la Tricolor , Alejandro Ramírez, que ese es el mismo sentimiento del grupo.
Aspectos técnicos y tácticos. Luego, con el inicio de las preguntas técnicas y tácticas de los diferentes medios de prensa pudo rearmarse.
Procedió entonces a explicar que el sustituto de Saborío en la lista de 23 que volarán a suelo sudamericano saldrá de los que están en el campamento y no de los cuatro que están en espera.
Argumentó que no hay un jugador que tenga idénticas características al corpulento atacante, pero que buscará llevar a alguien que pueda hacer un trabajo similar.
Le recomendó tener paciencia en la recuperación y hacer un esfuerzo por comprender el dicho “no hay mal que por bien no venga”.
Concluyó aduciendo que tratarán de convencerlo, si su club Real Salt Lake lo permite, de que acompañe a la Sele en Brasil para que se sienta cerca de la experiencia.