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En la imagen superior se observa al tico César Lizano (anaranjado) con los élites poco antes de comenzar la media maratón; abajo, a la izquierda, a la familia Navarro Lafuente (Ana Laura, Raquel, Alberto y Jorge); al centro, a Rolando Rodríguez y los esposos: María Isabel Cortés y Jorge Monge; y a la derecha, Minor Monge posando orgulloso con su medalla. | FOTOS CORTESÍA DE JORGE NAVARRO (ARRIBA E IZQUIERDA), JORGE MONGE (CENTRO) Y MINOR MONGE
Abrazado a su esposa, María Isabel Cortés, y con un frío atenuado por la intensa adrenalina, Jorge Monge celebraba con sus amigos el haber quedado segundo de su categoría en la media maratón de Miami, Florida.
Dicha competencia, disputada ayer en la mañana, reunió a 350 atletas costarricenses que llegaron con familias, parejas o solos, todos con el afán de disfrutar lo que les gusta: correr.
En el caso de Monge, quien tiene 51 años y es empleado bancario, acabó segundo en la categoría de los 50 a 54 años, con un tiempo de 1:27 horas, en la que fue su decimoquinta prueba fuera del país entre maratones y “medias maratones”.
Su esposa, por otra parte, concluyó los 21,195 kilómetros (media maratón) en 1:52, siempre con la sonrisa que todos los ticos llevaban al cruzar la meta.
“El clima estuvo frío y ventoso, pero la organización perfecta, me sentí muy bien”, expresó al concluir Jorge Monge, mediante su cuenta de Facebook.
Y es que el sentimiento de Monge es el mismo de todos los ticos en Miami, sean César Lizano, que acabó quinto en la élite de la media maratón, con 1:07, o Minor Monge que terminó con 1:54 en la que fue su primera media.
“Estuvo muy chiva, en toda la ruta nos pudimos identificar –los ticos–; sobre la carretera, habían muchas personas con banderas apoyándonos”, comentó Minor Monge por Facebook.
Minor, de 31 años y empleado del departamento de Juegos Nacionales del Icoder, añadió que llegó solo a tierras estadounidenses, mas pronto se contagió del ambiente generado por los cientos de coterráneos que ven en Miami una de sus competencias internacionales favoritas.
Otro que arribó por primera vez a la afamada carrera fue José Pablo Salas, quien acabó con 4:35 horas su debut en maratones.
Desde Cartago, Alberto Navarro y su madre, Raquel Lafuente, se iniciaron en media maratón con la complicidad de Jorge Navarro, padre y esposo, y Ana Laura, la menor de la familia.
“Ellos (hijo y esposa) habían corrido la media maratón Correcaminos del año pasado, pero esta es la primera fuera del país; además, corrió mi cuñada (Marianela Campos) y mi cuñado (Carlos Lafuente)”, manifestó Jorge Navarro por Facebook.
Igual de feliz que los Navarro se notó Esteban Zúñiga, ingeniero en computación de 29 años, que terminó la “media” en 1:18, lo que le ubicó como el segundo mejor costarricense, detrás de Lizano.
“Estuvo frío y ventoso, pero lo demás perfecto”, dijo Zúñiga, quien viajó junto a Alonso Calvo, Glori Alpízar, Leonel Zamora e Ileana Fernández, entre otros.
