La inconsistencia en los tiempos realizados por Nery Brenes durante la temporada 2015 es tema de preocupación para el futuro del velocista caribeño.
Este año, Brenes logró bajar en dos oportunidad de 45 segundos, en los 400 metros, al cronometrar 44:85 en la final de los Juegos Panamericanos en Toronto y 44:80 –la segunda mejor marca de su vida– en la semifinal del Torneo NACAC.
Sin embargo, al día siguiente en el NACAC cronometró 45:22 para quedarse con la presea de plata del campeonato regional.
Igual le sucedió en el Mundial de Pekín, China, donde pasó con un 45:08 la primera ronda y aunque parecía que tendría margen de mejorar, fue eliminado ayer en semifinales al ser último en el segundo heat , con 45:41.
Sergio Molina, entrenador de atletismo, consideró que Brenes llegó desfasado al Mundial de Pekín y su curva de rendimiento más alta no estaba encaminada al campeonato del orbe.
“Desde mi óptica, observando desde afuera, pues no soy su entrenador, creo que el problema de Nery está en la planificación. Su punto más alto de rendimiento no estaba en el Mundial, pues él logró su segunda mejor marca de por vida (44:80) en el NACAC. Es cierto que tuvo una buena temporada, pero es claro que le fue mal en el Mundial en cuanto a tiempos se refiere”, dijo Molina.
“No llegó bien y eso influyó en su rendimiento. Puede ser que le afectaron los tiempos de descanso y la recuperación no fue la adecuada, pues en ocho semanas tuvo una serie de competencias de muy alto nivel”.
Raúl González, entrenador y comentarista de radio Columbia, opina que Brenes debe dosificarse mejor, sobre todo en los cierres, pues allí es donde está fallando.
“Parte de la inconsistencia es que debemos recordar que Nery cambió de entrenador y ahora debe adaptarse a lo que le pide Emmanuel Chanto, debe madurar la idea”, estimó González.
“Parece que está mal dosificado, pues en los últimos 80 metros ya no tiene arrestos, no hay una buena coordinación entre la velocidad de reacción, al iniciar la prueba, y la aceleración máxima al momento de concluirla”.
Chanto, entrenador de Nery, admite que a su pupilo le ha costado adaptarse al sistema de entrenamiento que utilizan, pero aseguró que tienen margen para mejorar en el futuro.
“Todavía no encontramos el ritmo de carrera idóneo para competir, sabemos que podemos hacerlo, incluso estar por debajo de 45 segundos”, dijo Chanto.
“Tratamos de simularlo en los entrenamientos, pero no es fácil, además Nery corrió 13 veces en el último mes y medio entre eliminatorias, finales y relevos 4x400 y eso también afectó un poco”.