La primera edición de la carrera atlética La Tica Night Run, realizada el sábado en Cartago, generó un lío entre la Municipalidad de ese cantón y los organizadores.
El Concejo Municipal no autorizó realizar la prueba; sin embargo, su apoyo nunca ha sido requisito para tener el aval de la Federación Costarricense de Atletismo (Fecoa), con el cual contaba la competencia, confirmó el vicepresidente de la Fecoa, Gustavo Álvarez.
Álvarez aseguró a La Nación que el aval se da y después cada organización debe conseguir los permisos correspondientes de la localidad, pero dejó claro que La Tica Night Run cumplió con el plan de emergencias, ambulancias, croquis de ruta, reglamento, hidratación y premiación.
Por su parte, el alcalde de Cartago, Rolando Rodríguez, extendió una notificación en la que aconsejó no realizar la competencia.
"El Concejo, ni el Ministerio de Salud, ni el Tránsito ni Fuerza Pública autorizaron la carrera, por lo que los centenares de participantes y el tránsito vehicular y la gente estuvieron en un peligro latente", dijo Rodríguez, quien a su vez es el presidente del Comité Local de Emergencia.
Rodríguez agregó que "por el deporte mismo no debemos dejar que en estas carreras tan concurridas en el país solo prevalezca el negocio".
Pese a esa queja, Johnny Loría, atleta élite y encargado de la ruta de la prueba, mencionó que contaron con 50 personas como guías, quienes además regularon el paso de vehículos durante los 9 kilómetros del recorrido.
"Todos los carros se regularon con guías, como en todas las carreras del país. La Polícia de Tránsito nos dijo que no podía cubrir el evento, pero en ningún momento se causó gran trastorno vehicular y no se tuvo ningún incidente, ni bloqueos, todo estuvo bien", comentó Loría.
En un último intento para que la carrera se cancelara, la Municipalidad hizo un perifoneo, informando a los atletas que esta carrera no tenía los permisos correspondientes, por lo que era un riesgo para ellos. No obstante, los participantes hicieron caso omiso.
La carrera tuvo un costo de inscripción de ¢15.000 y empezó a las 6 p. m., con salida en la Plaza de La Soledad, y recorrió diversos barrios y distritos cartagineses.