El no tener patrocinio actualmente, haber realizado una pretemporada en Bogotá, Colombia, y tener que cumplir con los pagos de su apartamento, fueron las razones para que la atleta colombiana Jenny Méndez compitiera este domingo en el Reto Powerade, a pesar que no estaba en su calendario.
Tanto Méndez como su esposo y entrenador Daniel Gaviria, explicaron que la situación actualmente no es apremiante en la parte económica, pero sí era necesario participar y ganar para solventar algunas deudas pendientes.
Méndez corrió y triunfó, una vez más, en la prueba de 21 kilómetros realizada en San Antonio de Belén con un tiempo de una hora 24 minutos y 13 segundos. Mientras tanto, el segundo lugar fue para Cristina Marín con 1:26:39 y Norma Rodríguez fue tercera con 1:28:03.
"A pesar que la carrera no estaba planificada en nuestro calendario logramos el podio, pese a lo difícil de la prueba, con ascensos pronunciados y una cuesta engañosa al cierre de la competencia. La cuestión es que los atletas de alto rendimiento tenemos gastos extras en la alimentación y preparación, esos rubros se van sumando y al final por la fata de patrocinio y buenos premios en las carreras es que hemos tenido algunos desajustes”, comentó Méndez.
"Actualmente debemos dos meses de nuestro apartamento (Méndez prefirió no decir el monto de lo adeudado), pero gracias a Dios vamos saliendo. No entiendo el porqué las empresas privadas ya no quieren darle un empujoncito a los atletas, pero igual vamos a salir adelante", añadió Jenny.
La corredora colombiana comentó que espera estar en la Maratón de Tamarindo, en los 21 kilómetros, y tiene todo listo para competir en una maratón en Illinois, Estados Unidos, a la cual asiste porque se ganó el tiquete de avión en una de las carreras.
Gaviria, quien entrena a Méndez, comentó que el atleta debe realizar un sinúmero de sacrificios para cumplir sus metas y en su caso, tras terminar el ligamen de su patrocinio, los gastos del viaje a Colombia y el pago de la casa, ella tuvo que correr a pesar de estar en fase de pretemporada.
"Jenny no tiene tanto ritmo al estar empezando un nuevo proceso, pero nosotros tenemos un compromiso con la persona que nos renta el apartamento y debemos cumplirle. A ella siempre le costó esta carrera, incluso la terminó lesionada en años anteriores, por eso no íbamos a correrla, pero al final decidimos hacerla", dijo Gavirira.
"Lo que sucede es que en las temporadas pasadas habían competencias muy bien pagadas, pero ahora es diferente. Por ejemplo en el último mes la prueba mejor premiada fue la de Columbia con ¢200 mil en 10 km, mientras hoy la cifra del premio es muy similar pero son 21 km, (¢250 mil) por lo que creo que la Federación de Atletismo debería tener un mejor control en ese aspecto de las premiaciones en cuanto a las distancias, porque a veces no son las óptimas".