Tokio, Japón. Bryan Vásquez se despojó completamente de su ropa, detrás de una barrera de paños, y subió a la báscula. El anunciador certificó que la balanza quedó en las 130 libras y dio el aviso oficial: el Tiquito dio el peso y así quedó listo para la pelea de mañana ante Takashi Uchiyama, por el título en propiedad del peso superpluma de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB).
La ceremonia se realizó a las 2 p. m. de hoy en Japón (11 p. m. de ayer en Costa Rica) en una sala adjunta al Tokyo Dome, el estadio del equipo de beisbol los Gigantes de Yomiuri.
Alguien de la comitiva del japonés trató de ensayar una apelación acerca del peso del Tiquito; pero este apenas “cantaron” sus 130 libras (59,09 kilos fue el anuncio oficial, se vistió más rápido que ligero y tomó agua: con eso quedó desvirtuada cualquier movida del otro bando.
Luego de la ceremonia (Uchiyama fue el primero en subir a la báscula) volvieron a posar la multitud de fotógrafos, tal y como lo hicieron en la primera parte del encuentro, en la que firmaron los contratos de la pelea, escogieron los guantes, de la firma japonesa Winning, los cuales también fueron rubricados por cada peleador y respondieron preguntas de la prensa, que atestó la sala.
El hacinamiento era tal que el sitio se convirtió en un sauna, a pesar de que el exterior la temperatura andaba por los 4 grados centígrados y caía una lluvia pertinaz.
Tras el pesaje, el Tiquito fue hidratado con suero y una hora después almorzó dos platos de pasta. También fue revisado por la doctora Elizabeth Flores y recibió una inyección de vitaminas antes de retirarse a dormir.