Pedro Álvarez y Rusell Martin respondieron a la hora buena, en la baja de la octava entrada, y trajeron al plato sendas carreras para que los Piratas derrotaran a los Cardenales en el tercer partido de la serie divisional del Viejo Circuito.
Con el 5-3 de ayer, Pittsburh quedó arriba, dos triunfos a uno; solo le falta un triunfo para llegar a la serie campeonato de la Liga Nacional.
Francisco Liriano tuvo una apertura ejemplar: en seis entradas permitió dos carreras, con tres imparables y dos bases por bolas.
Pero al lanzador zurdo se le fue la victoria cuando los Cardenales empataron la pizarra a tres carreras por bando, con un jonrón solitario del jardinero Carlos Beltrán en la parte alta de la octava.
En la baja de la octava, Álvarez pegó sencillo para que Josh Harrison anotara.
Martin repitió la dosis, con imparable para que Marlon Byrd pasara por el plato.
El rescate fue de Jason Grilli.
19 carreras en el Dodger Stadium. La novena de Los Ángeles volvió a recibir un partido de postemporada por primera vez desde el 2009, y ¡qué partido! Marcador de 13-6.
Definitivamente fue una noche para los maderos. Dos jugadores de los Dodgers pegaron jonrón: Carl Crawford, para impulsar tres carreras en la segunda, y Juan Uribe, para impulsar dos en la cuarta.
Hanley Ramírez pegó doble y triple. Anotó tres e impulsó dos.
El novato sensación Yasiel Puig también tuvo su noche: pegó tres imparables y anotó tres veces.
Los Bravos iniciaron ganando temprano y el abridor local, Hyun-Jin Ryu, salió en la cuarta, responsable de cuatro carreras.
Fue peor noche para el abridor de Atlanta. El colombiano Julio Teheran salió en la tercera tras haber recibido seis anotaciones.
El triunfo fue para Chris Capuano, quien tomó el montículo después de la debacle inicial y lanzó para tres sólidas entradas en las que no permitió un solo hit .