San Isidro de El General. Fue una madrugada de enero, hace dos años. Yeudy Salazar y su familia dormían profundamente en su casa en Páramo, Pérez Zeledón, cuando sus tres perros comenzaron a ladrar como lo hacían cualquier otra noche.
Por la mente no les pasó la idea de que era la última vez que escuchaban a sus mascotas.
Al salir el sol, Salazar encontró sus animales muertos, envenenados por los ladrones, quienes también les robaron de su casa un cuadraciclo Suzuki que había comprado cuatros meses antes en casi ¢6 millones.
"No nos explicamos cómo hicieron para sacarlo, ya que había un carro atravesado que lo impedía. No sabemos si fue que lo sacaron de alguna manera por encima del carro o que sacaron el carro y lo volvieron a poner en la posición que estaba. Nadie en la casa escuchó, incluso había de pared por medio alguien durmiendo y ni cuenta se dio", recordó Salazar.
Los vehículos no estaban protegidos por un portón, solo el que tiene la entrada de la propiedad, agregó Salazar, quien interpuso una denuncia ante el OIJ, que fue archivada debido a la poca cantidad de evidencia en el lugar.
La víctima agregó que esa misma noche ocurrió el robo de tres cuadraciclos más en su vecindario, utilizando la misma técnica.
Distintos métodos. El de Salazar es uno de los 97 robos de vehículos por el método del "cocherazo" que se han registrado en el cantón de Pérez Zeledón entre enero del 2010 y junio del 2012.
Ese es el que más utilizan los ladrones de carros en los pueblos alejados del área metropolitana de San José, según se desprende de los datos entregados por el OIJ.
El 56 % de los automotores sustraídos en Pérez Zeledón, entre enero del 2010 y junio del 2012, los ladrones se los llevaron de los garajes o patios de la casas.
De los diez cantones que registraron más robos por "cocherazo", seis están fuera de la capital y alrededores: San Carlos, Pérez Zeledón, Grecia, Pococí y Puntarenas.
La razón, dicen las autoridades, es que en las zonas rurales las casas no tienen tanta protección como en ciudades del área metropolitana.
"No es lo mismo una cochera en Desamparados que una en San Ignacio de Acosta", dijo Diego Chavarría, jefe de la sección de Robo de Vehículos del OIJ.
"En Acosta, la gente está más confiada, el candado es más malo. En San José hay sensores de movimiento en las cocheras, alarmas, sistemas antibloqueo de los portones eléctricos. La gente asegura los portones eléctricos con candados por dentro", agregó Chavarría.
"Eso influye muchísimo para que en la zona rural se roben más carros por 'cocherazo' que en San José", afirmó el funcionario.
También las características de los ladrones cambian, según sea el método que utilizan para robar.
"El perfil del sujeto que roba por 'cocherazo' es diferente, es gente mayor, de la vieja escuela, sujetos de 50 años. Por el contrario, quienes roban por descuidos y 'bajonazos' es gente muy joven, de 17 a 20 años, que tienden a ser más violentos", resaltó Gustavo Mata, jefe de Investigaciones Criminales del OIJ.