La OMS creó la comisión para evaluar su actuación tras el brote global del virus AH1N1. El grupo dijo que la actuación fue positiva en muchos aspectos, pero hubo errores cruciales.
Asimismo, consideró innecesariamente complejas la definición de pandemia y sus fases; criticó la decisión del organismo de mantener en secreto la identidad de los miembros de su comisión asesora, y dijo que los potenciales conflictos de intereses entre esos expertos, algunos de ellos ligados a farmacéuticas, no fueron bien atendidos.
Advirtió que bajo la supervisión de la OMS, el mundo no está preparado para encarar un desastre sanitario importante en el futuro. “El mundo está mal preparado para responder a una pandemia grave de gripe en caso de una emergencia similar global”, dijeron.