Nuevos tamizajes buscan reducir mortalidad y enfermedades en bebés

Dentro de estas pruebas hay un tamizaje auditivo, otro para detectar malformaciones cardíacas y uno para buscar una bacteria en mujeres embarazadas que puede ser mortal en sus bebés.

Mejor audición. Desde junio pasado, especialistas de la CCSS han podido detectar sordera profunda en seis recién nacidos.

Esto se logró gracias al nuevo tamizaje auditivo que se realiza en los centros médicos públicos antes de que el niño salga del hospital, para así diagnosticar de manera temprana posibles problemas relacionados con la audición.

La hipoacusia neurosensorial (que va desde una leve dificultad para escuchar hasta la sordera) se da en uno de cada 1.000 nacimientos.

A quienes no pasan esta prueba se les realizará otro tamizaje. También se investigará su causa y se referirán a un nivel de mayor complejidad (hospital más especializado) donde se les brindará un tratamiento audioprotésico (audífono o implante) en forma temprana.

Posteriormente, los pacientes seguirán en evaluación en los diferentes niveles de atención en salud. Se coordinará para que tengan terapia en educación y así se pueda reducir los problemas de aprendizaje que tienen algunos niños.

Este no es el único nuevo plan de tamizaje que tiene la institución. Este viernes se informó que, a partir de setiembre, se realizará una prueba diagnóstica para detectar malformaciones graves en el corazón de los bebés.

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Este test se llama oximetría de pulso, y sirve para constatar cuánto oxígeno hay en la sangre. Un corazón con malformaciones no es capaz de llevar la suficiente cantidad de oxígeno a los glóbulos rojos. La CCSS compró 28 oxímetros de pulso para las 23 maternidades del país.

Los casos positivos serán referidos al Hospital Nacional de Niños para su tratamiento.

Contra bacteria peligrosa. Finalmente, la CCSS también indicó que a finales de este año se comenzará con otro examen en las mujeres embarazadas. Esta prueba buscará una bacteria que puede ser mortal para los recién nacidos.

El patógeno, llamado estreptococo beta-hemolítico agalactiae, usualmente se encuentra en el tracto digestivo de las personas. El problema se da cuando un bebé nace en un parto vaginal y es expuesto a este microorganismo.

Estos niños pueden contraer la infección y desarrollar complicaciones como una sepsis o infección en la sangre, neumonía, meningitis y artritis.

La nueva prueba se hará en la semana 35 de embarazo.