Unos 500 muñecos de trapo están listos para su misión: llegar a la plaza de la Cultura en el centro de San José este sábado a las 9:30 a. m. y "tomar" el espacio, con la consigna de que los niños costarricenses necesitan más sitios públicos para jugar.
Durante junio, julio, agosto y la primera semana de setiembre, chiquitos y sus familiares elaboraron a mano estos muñecos. Cada uno lo hizo a su gusto, por lo que todos son diferentes.
Casi todos los materiales (telas, relleno, agujas, hilos, botones, etcétera) fueron donados y en su mayoría son de reciclaje.
La actividad se denomina "Presencia" y busca tomar espacios públicos para hacer conciencia de la importancia de que los niños tengan lugares para jugar y relacionarse con gente de su edad y de otras generaciones. Esta es la cuarta vez que este evento se realiza en suelo nacional, y es organizado por la Fundación Red Solare Costa Rica.
"Hay gente que todos los años nos dice que quiere hacer un muñeco, pero este año también contamos con muchísimas manos nuevas. Colaboraron personas de diferentes escuelas, comunidades y del Hospital de Niños", indicó Carolina García, presidenta de la Fundación Red Solare.
"Lo bonito es que también vamos a tener materiales para que la gente llegue y haga su propio muñeco y se lo lleve a la casa. Que niños compartan con adultos y hagan su muñeco juntos y que los adultos también recuerden su infancia", añadió.
Juego libre
La actividad "Presencia" nació en Salvador Bahía, Brasil en el 2012 con el lema: "La ausencia genera violencia, hagamos presencia". El movimiento ganó impacto en el mundo y está activo en otros países como: Sudáfrica, Angola, Argentina, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Italia, México, Mozambique, Panamá, Paraguay, Perú, Portugal, República Dominicana, Suecia y Uruguay.
El proyecto también promueve la creatividad infantil.
"Hay varias familias que llegan porque buscan festejar un día del niño diferente. No es dar un regalo ya hecho, es crear un juguete juntos, compartir el rato. Que el niño explote su lado creativo, que jueguen con lo que quieran, que brinquen, que corran, que –mientras respeten a los demás y respeten el espacio– se adueñen del juego", enfatizó García.
Los muñecos no estarán a la venta: se regalan a quienes se acerquen a jugar con ellos.
"Hemos tenido experiencias muy lindas. El año pasado una adulta mayor en condición de pobreza llegó y nos dijo que quería varios para regalarle a sus nietos en Navidad. Le dimos varios. Estamos seguros de que sus nietos disfrutaron mucho con ellos", concluyó García.