Washington. EFE. Un grupo de investigadores de Japón halló un tratamiento para la epilepsia basado en el metabolismo, lo cual supone un giro respecto al tradicional enfoque neuronal de esta enfermedad, según se lee en un artículo publicado en la revista Science .
En el texto, los científicos explicaron que esta vía metabólica podría llevar al desarrollo de medicamentos, dado que los tratamientos hoy son inefectivos para un tercio de pacientes.
El hallazgo se generó a partir de otro descubrimiento de los años veinte: la dieta cetogénica, que se basa en las grasas, limita al mínimo los carbohidratos y alivia los casos de epilepsia resistente a los medicamentos.
Con esa dieta, la mayor fuente de energía del cerebro son las cetonas, en vez de la glucosa.
Según este nuevo estudio, la inhibición de la enzima lactato deshidrogenasa (LDH), clave en la comunicación metabólica entre los astrocitos y las neuronas, bloquea la excitación neuronal y evita las convulsiones en ratones con epilepsia.
“Por consiguiente, los inhibidores de la LDH serían los primeros medicamentos antiepilépticos en imitar las dietas cetogénicas” , señaló el artículo.
Los investigadores probaron 20 medicamentos antiepilépticos y determinaron que solo uno, el estiripentol, inhibió la LDH hasta cierto punto.
En un estudio más profundo del medicamento, identificaron una subestructura, el isosafrol, que inhibe propiamente la producción del lactato.
De este modo, la investigación sugiere que los derivados del estiripentol podrían llevar a mejores tratamientos para epilepsia resistente a medicinas.
La tesis del estudio es que hay pruebas suficientes de que “elementos no excitables” del sistema nervioso central (los astrocitos, el sistema vascular y el sistema inmunitario) juegan un papel más importante del considerado hasta ahora en el tratamiento de la epilepsia.
Aproximadamente, el 1% de la población mundial tiene epilepsia, pero los medicamentos disponibles en la actualidad solo son efectivos para dos tercios de esos pacientes.
Los científicos, como evidencia el estudio que recoge Science , debaten si el enfoque del desarrollo de nuevos tratamientos anticonvulsivos tiene que ser el tradicional, centrado en las neuronas, o bien el que gira en torno al metabolismo.
Los investigadores que firman este estudio son Nagisa Sada, Takashi Katsu y Tsuyoshi Inoue, de la Universidad de Okayama (Japón) ; y Suni Lee y Takemi Otsuki, de la Universidad Yasuda Women's en Hiroshima (Japón).