“No importa a lo que nos dediquemos, todos sentimos tensiones. El estrés no es malo. Hay gente que lo sataniza y lo ve como algo malo, cuando, más bien, el estrés es el que nos ayuda a hacer mejor las cosas y alcanzar el éxito. La diferencia entre quienes logran éxito y los que no es que los que tienen éxito sí supieron manejar bien el estrés”.
Con estas palabras, el nadador de aguas abiertas costarricense Kurt Niehaus motivó a los jóvenes para aplicar el estrés a su favor.
Durante el evento TEDx Joven Pura Vida 2011 –realizado el jueves anterior en la Universidad Véritas, en Zapote, San José–, el deportista dio consejos sobre cómo el entrenamiento mental de un deportista puede ayudar a manejar la tensión en el estudio o trabajo. Este es un extracto de la conversación.
Hay varios aspectos del deporte que pueden aplicarse a la vida profesional o académica y que normalmente no se utilizan en estas áreas.
”El atleta del alto rendimiento trabaja mucho esta parte mental, de relajación, de visualizarse obteniendo éxitos.
”Extrañamente, el deportista no está expuesto a un estrés tan constante como los ejecutivos o los estudiantes. Los que trabajan o estudian tienen estrés todos los días; en cambio, en un atleta es solo el 10% de su tiempo”.
Primero, hay que tener muy bien definida cuál es tu meta. Al igual que un deportista lo hace, una persona debe definirla antes de una reunión importante o proyecto.
”Cuando vienen los momentos de más estrés, es cuando uno tiene que mirar dentro de uno mismo.
”Hay que tener una conversación consigo mismo y si uno ve que hay muchos pensamientos negativos y muchas dudas hay que frenar en ese momento y sustituir todo eso por pensamientos positivos.
”La segunda parte es respirar profunda y lentamente para relajarse y llegar a tener armonía.
”Finalmente, está la visualización: es imaginarse el resultado que uno quiere. La mente es tan poderosa que uno tiene más posibilidad de tener éxito si uno visualiza los resultados antes”.
El fracaso es algo con lo que siempre debemos jugar, tanto en el deporte como en la vida profesional. Muchas veces nos pasa que debemos lidiar con condiciones extremas. A mí me pasó una vez en una competencia internacional: tenía toda la preparación física y mental, pero al llegar el agua estaba tan fría que tuve hipotermia y no pude seguir. No habíamos previsto la temperatura del agua.
”En la vida tanto académica como profesional, eso nos pasa; uno no puede tenerlo todo bajo control; debemos conocer nuestras limitaciones y saber que esos tropiezos lo hacen a uno tomar fuerzas para enfrentar retos más grandes.”