Los vecinos de Corozalito, en el distrito de Bejuco, cantón de Nandayure, Guanacaste, son los dueños del primer acueducto de Costa Rica en funcionar en un 100% con energía solar.
Con esto, la asociación administradora del sistema de acueductos (asada) local sustituye la tradicional forma de abastecimiento energético, por el uso de paneles solares.
Según datos del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA), las asadas destinan hasta un 70% de sus ingresos al pago de la factura eléctrica.
Por lo tanto, la expectativa es que el cambio se traduzca en un mayor ahorro de recursos para las 55 familias que son abastecidas por este acueducto.
Las obras incluyen dos tanques, de 22.000 litros cada uno, así como una bomba de mayor capacidad, la cual será activada por los paneles.
Un paso para la comunidad
La inauguración del acueducto, que se llevó a cabo el viernes 12 de mayo, vino a solucionar un problema para los pobladores de Corozalito. El terremoto de Nicoya, ocurrido en el 2012, afectó el sistema de almacenamiento y los pozos de agua. En esa ocasión, el tanque del acueducto se agrietó, lo que ponía en riesgo la salud de los habitantes, por una posible contaminación del agua.
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A esto se sumaba el hecho de que, por estar a la misma altura de las casas, el líquido no llegaba a todos los vecinos.
“Antes, el agua no llegaba con fuerza por falta de presión, ya que las casas estaban al mismo nivel del tanque. Ahora llega perfectamente y no hay desabastecimiento”, dijo Meritina Vásquez, vecina de Corozalito.
Miembros de la comunidad participaron activamente en el proceso de construcción del acueducto, que se levantó en un terreno propiedad de la asada local.
El proyecto fue impulsado por Coca-Cola Femsa, a través de la Fundación Femsa y ejecutado por la organización Aliarse. Además, contó con el apoyo de AyA y de la municipalidad de Nandayure.