Desde hace bastantes años (desde 1999, para ser exacto), he venido defendiendo la grafía membrecía (con c ), apoyado no solo en mi oscuro instinto de ceceante español, sino en una serie de consideraciones lingüísticas.
Por ejemplo, los sustantivos derivados terminados en -sía mantienen esa s por provenir de nombres que ya la llevan: burguesía (de burgués), cortesía (de cortés), feligresía (de feligrés), alevosía (de alevoso)... Obviamente, este no es el caso del vocablo membresía , derivado de miembro, que carece de s .
Membrecía posee una formación análoga a clerecía y primacía. [Una situación parecida es la de los diminutivos. Terminan en -sito, -sita únicamente los derivados de nombres que ya llevan s ; los que no tienen esa s hacen el diminutivo en -cito, -cita. Así, condesita (de condesa), pero condecito (de conde)].
La actual vigésima segunda edición del DRAE (2001) registra membresía (con s ) como hispanoamericanismo. De membrecía (con c ), no dice nada.
Pero en el 2005 aparece el Diccionario panhispánico de dudas, de la RAE, que recoge la siguiente exposición: “ membrecía . En muchos países americanos, ‘condición de miembro’ y ‘conjunto de miembros’: «Cumplir con los criterios para obtener la membrecía en la unión monetaria económica de Europa» (Excélsior [Méx.] 2.1.97); «El éxito con que culminó la huelga[...] favoreció el aumento de la membrecía de esa federación» (Gordon Crisis [Méx. 1989]).
Aunque, debido precisamente al seseo, está muy extendida en el uso la forma membresía, la grafía correcta es membrecía, ya que el sufijo español para formar este tipo de derivados es -cía (de abogado , abogacía ; de clero , clerecía ); la terminación -sía es propia de los sustantivos derivados de nombres o adjetivos que terminan en s: burguesía (de burgués), feligresía (de feligrés)”.
Y, finalmente, el último diccionario oficial de la RAE, publicado en el 2006, el Diccionario esencial de la lengua española, registra únicamente MEMBRECÍA (con C ) y atribuye el uso de este término a México y América Central. Se da por supuesto que eso mismo recogerá la próxima edición del DRAE.
Mientras tanto, es necesario que la Academia, en la edición virtual (en Internet) de su diccionario, elimine membresía y agregue, en calidad de artículo enmendado, membrecía .
Como acabo de expresar, supongo que la Real Academia Española, para la vigésima tercera edición de su diccionario oficial, ya tendrá listo el cambio que estoy comentando: membrecía (con c ) en lugar de membresía (con s ). Si acaso se les pasó por alto a mis colegas de la RAE, estoy pidiendo a Dios que lean esta columna para ver si así…