“Sebastián me ha enseñado a valorar la vida. Lo amo con todo mi corazón aunque no sea mi hijo”, asegura, con voz entrecortada, Alejandra Brenes Morales. Ella es el bastión de su sobrino nieto de ocho años, quien padece porencefalia, un quiste maligno que se le desarrolló en el cerebro durante el proceso de gestación y que le producía ataques de epilepsia.
Cuando el niño nació, su madre biológica no pudo seguir cuidándolo y doña Alejandra, llena de amor, asumió el reto de aferrarse a la vida con el pequeño. Juntos, estos vecinos de Paraíso de Cartago han emprendido un camino entre salas de cirugía y salones de hospital; eso sí, ha sido una travesía colmada de plegarias y de mucha fe.
De esa entrañable lucha de Sebastián y su madre adoptiva es testigo la Asociación Pro Ayuda Hospital Nacional de Niños (HNN). Con la donación de equipo médico por medio del proyecto Teletón, una iniciativa del Club Activo 20-30 Internacional, miles de niños y sus familias se han beneficiado gracias a la solidaridad de los costarricenses en estas maratónicas.
“Recuerdo que a los cuatro meses sufrió una convulsión que requirió la extracción de parte de su cerebro. Sin embargo, luego de una cirugía realizada por el Hospital, mi hijo ya no sufre ataques de epilepsia. Habla, ríe… Hoy Sebastián es un niño amado y muy feliz”, cuenta satisfecha.
Teletón ha hecho posible la recaudación de más de ¢8 mil millones, los cuales han servido para entregar equipos médicos que mejoran el diagnóstico y tratamiento de los menores de edad no solo en el Hospital de Niños, sino en hospitales de la Gran Área Metropolitana (GAM) y zonas rurales como Limón, San Carlos, Pérez Zeledón y Puntarenas, entre otros.
