Vuelo de la presidenta Laura Chinchilla acaba con la caída de su hombre fuerte

Con la voz quebrada y el rostro pálido y desencajado, el ministro de Comunicación y asesor de máxima confianza de la presidenta Laura Chinchilla, Francisco Chacón González, renunció ayer.

Se fue al final de la tarde, tras aceptar frente a los periodistas que un empresario colombiano lo engañó con una identidad falsa antes de prestarle al Gobierno un jet en el que Chinchilla viajó a Perú este fin de semana.

El extranjero se presentó ante el ministro como Gabriel O´Falan, pero su nombre real es Gabriel Ricardo Morales Fallón, un ejecutivo de 46 años que hace cinco fue cuestionado en su país por una presunta relación con el narcotraficante Carlos Ramírez Abadía, alias Chupeta, según publicó la prensa colombiana.

“Yo soy el que he dado la cara ante ustedes defendiendo la validez del viaje, defendiendo de que la empresa era correcta y que sus actividades eran incuestionadas. Ante la realidad de hoy siento que lo correcto es presentar mi renuncia irrevocable”, dijo Chacón.

“Yo tengo que asumir una responsabilidad política ante el país y ante ustedes”, agregó.

Anoche, Casa Presidencial señaló mediante un comunicado de prensa que Chinchilla asumió los hechos con “indignación” y “gran preocupación”.

Desde el 2007, el colombiano Morales ha presidido de forma intermitente la empresa Thorneloe Energy, domiciliada en Panamá.

La firma tiene una sucursal en Colombia que se dedica a la explotación de gas y petróleo. Hace cuatro meses, cambió su nombre a THX Energy, según anunció la firma en su página web.

El martes, este medio le consultó a Chacón por el verdadero nombre del empresario y le pidió que confirmara su identidad mediante una fotografía que se le envió. Él no contestó y tampoco respondió las múltiples llamadas telefónicas que se le hicieron.

Según Chacón, el contacto con Morales surgió por referencia de terceros, tras fracasar un intento de conseguir con otras empresas un avión para que la presidenta pudiese viajar a Lima, para asistir a una boda y reunirse con el presidente de Perú, Ollanta Humala.

Chinchilla ya había utilizado la misma aeronave para viajar al funeral del presidente venezolano Hugo Chávez, en marzo anterior.

La reunión con Morales Fallón -aseguró Chacón- fue concretada por el director de protocolo de Casa Presidencial, Ludwig Sibaja.

El 8 de mayo, tres días antes del viaje a Lima, el ministro Chacón y la asistente de la presidenta, Irene Pacheco, se reunieron con el empresario colombiano y el futbolista Rolando Fonseca, quien dijo ser consultor de THX Energy.

“Yo quise ir para que me contaran las actividades que tenían en el país y verificar que no existía ningún conflicto de intereses de la empresa”, explicó ayer el ministro.

Chacón mostró una tarjeta que le entregó Morales ese día, en la que se presentó con el nombre de Gabriel O’Falan, directivo de una empresa llamada Gas Oil & Mining.

“Él se presentó a esa reunión con una tarjeta de presentación falsa, con el objeto expreso y claro de engañarme”, contó el ahora exministro de Comunicación.

Tras conocer la identidad real de Morales, Chacón y el viceministro de la Presidencia, Mauricio Boraschi, interpusieron una denuncia en su contra ante el fiscal general, Jorge Chavarría, por el supuesto delito de uso de identidad falsa.

¿Cómo pudo Morales engañar al ministro y al cuerpo de inteligencia de la presidencia de la República? Boraschi y Chacón aceptaron que los controles fallaron.

“Es una persona que no tiene una orden de captura pendiente en la Interpol, no tiene antecedentes ni acá ni en Colombia (...). No es buscado en este momento ni por la policía colombiana ni por la policía costarricense”, añadió Boraschi.

El viceministro dijo que las autoridades ticas no han hallado un vínculo del avión en el que voló la presidenta con la firma colombiana. Sin embargo, registros de la Administración Federal de Aviación, de Estados Unidos en poder de este medio, señalan a Thorneloe Energy como operadora de la nave.