Madrid. EFE. Un 13,5% de las rayas y tiburones tanto del Caribe como de Norteamérica y Centroamérica entran en alguna de las tres categorías de amenaza descritas en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), un índice para medir su estado de conservación.
El informe del Grupo de Especialistas de Tiburones (SSG, por sus siglas en inglés) de UICN, dependencia creada en 1991, identificó hasta 20 tiburones y nueve rayas de la región en situación de vulnerabilidad y con un “elevado riesgo de extinción”.
El 16% de las especies evaluadas se clasificaron como “casi amenazadas”, el 27% como “de preocupación menor” y del 43,4% no se obtuvo suficiente información para calificar su estado de conservación.
Este grupo de expertos se reunió esta semana en Vancouver, Canadá, y dio a conocer la primera recopilación del estado de conservación de 300 tiburones y rayas.
El informe se presenta como un argumento para solicitar la actuación de los Gobiernos de la zona, responsables tanto de la protección de las especies en peligro como del cumplimiento de las políticas pesqueras, la limitación de capturas según recomendaciones científicas y la cooperación internacional para el seguimiento de ejemplares migratorios de interés comercial.
“El 25% de las especies de condrictios (como se clasifica a los peces cartilaginosos) están amenazadas y las que corren mayor peligro son las rayas”, sostiene el informe.
Entre las que se sitúan en “peligro crítico de extinción” están la raya eléctrica del Caribe ( Narcine bancroftii ), la raya de diente largo ( Pristis perotteti ) y la raya de diente pequeño ( Pristis pectinata ), además del tiburón nariz de daga ( Isogomphodon oxyrhynchus ).