Desde que David Vargas Rojas ingresó ayer en la sala del Congreso, lo hizo en silencio.
Y lo rompió solo para decir que se iba a abstener de declarar.
Vargas llegó como testigo en la investigación a las finanzas de campaña del PLN, pero ayer no aportó nada. Su silencio únicamente causó el enojo de los diputados de oposición.
Durante la campaña electoral, Vargas era chofer del actual diputado del Partido Liberación Nacional (PLN) Óscar Alfaro y lo llamaron a declarar porque, según lo explicó la diputada Jeannette Ruiz (PAC), él cambió varios cheques girados por el Partido a terceras personas y depositó los fondos en una cuenta bancaria de una sociedad anónima ligada a su exjefe.
Se trata de dineros que, según determinó el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), pagó el Partido por el alquiler de vehículos para usar en la campaña, los cuales, al parecer, no llegaron a los destinatarios y por eso la Fiscalía investiga aún en qué se utilizaron.
Ayer, frente a los diputados, su abogada Hellen Duarte anunció la negativa de su cliente a responder consultas. Luego, el presidente de la comisión, el liberacionista Luis Fernando Mendoza, le pidió que fuera él mismo quien lo hiciera. Y confirmó que se abstenía.
Minutos después, Duarte dijo al presidente de la comisión: “Solicitamos retirarnos de la comisión, pues se ha cumplido con la presencia física de don David y en el caso de que él no va a rendir declaraciones, me parece que se cumple la finalidad de su asistencia”.
La autorización de Mendoza para que saliera del recinto sin que los demás diputados pudieran hacer las preguntas, aunque él no respondiera, aumentó el enojo entre los legisladores de oposición.
Jeannette Ruiz, del Partido Acción Ciudadana, lamentó la postura del compareciente. “Es una lástima que no hayamos podido escuchar de la voz de uno de los actores que participó en el proceso, lo que ahí sucedió. Él manifestó en algunos medios que había endosado unos seis cheques”.
También, el libertario Danilo Cubero manifestó su molestia. “De eso (que se abstenga) a que se le permita ponerse de pie y que se vaya, es un pésimo precedente”, expresó.
En respuesta, el presidente del grupo, Luis Fernando Mendoza, se preguntó: “¿Qué sentido tiene que escuche las preguntas que no va a responder?”.