Detectar y atender a tiempo el fallo en un puente podría ser posible.
Con ese objetivo, un grupo de investigadores del Instituto Tecnológico de Costa Rica (TEC) trabajan en el proyecto denominado eBridge, que consisten en la instalación de sensores que arrojen datos y permitan predecir el desperfecto.
“Instalamos un sistema de monitoreo que permite medir ciertas variables que están relacionadas directamente con el desempeño estructural del puente”, explicó Giannina Ortiz, ingeniera a cargo del proyecto.
Ayer, se realizaron pruebas en el paso sobre el río Purires, en San Isidro de El Guarco, Cartago, donde se evaluó la respuesta ante el trasiego de diferentes cargas.
Los resultados serán comparados con modelos teóricos y así determinar si la estructura requiere de alguna intervención.
Para estas acciones contaron con apoyo de empresas privadas e instituciones públicas.
Según Ortiz, este tipo se sensores se podrían colocar en puentes nuevos, mientras que en otros casos se usan para pruebas como las realizadas ayer.
Desde el 2010, el Gobierno inició un plan de reparación y construcción de 200 puentes.
Además, están pendientes obras de reforzamiento del paso sobre el río Virilla en la Autopista General Cañas, por donde pasan hasta 90.000 vehículos diarios.