De acuerdo con una nota que Castro hizo circular, Patricia Pérez, del Movimiento Libertario y presidenta de la comisión de Control de Ingreso y Gasto Público, y Manrique Oviedo, del Partido Acción Ciudadana (PAC), solo intentan obtener réditos políticos, “sin hacer ningún bien al país”.
El jerarca, que a mediados de 2010 era el ministro de Relaciones Exteriores y dio el permiso para que Nicaragua hiciera el dragado del río San Juan, indicó que los legisladores cometen una “gran injusticia” al responsabilizarlo por la invasión nicaraguense en isla Calero, asunto que sirvió de excusa para la construcción de la trocha fronteriza.
“Esta es una mentira injusta que se ha mantenido por mucho tiempo y que ha sido incluso repetida por diversos medios de comunicación, y es momento de que se acabe con esta mentira”, dijo el jerarca de Ambiente.
Según Castro, él nunca autorizó que Nicaragua efectuara el dragado en el San Juan, pues insiste en que Managua no necesita permiso tico para esa labor.
René Castro cree que el pronunciamiento de la Corte Internacional de Justicia de La Haya no fue debidamente interpretado en el despacho de Patricia Pérez, por “encontrarse en idioma inglés”.
“Ningún canciller o político de un país debería ser injustamente responsabilizado cuando un gobierno autoritario ha tomado la decisión de invadir a otra nación por conveniencia propia”, dijo el excanciller.
Pérez y Oviedo pidieron la cabeza de Castro, y además la destitución de Mauricio Boraschi, viceministro de Presidencia y comisionado nacional antidrogas, y de la presidenta ejecutiva de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), Vanessa Rosales.