El Nacional de Venezuela (GDA). La evolución de la tecnología hacia chips más compactos y de mayor poder de cómputo parecía conducir a la industria de la computación a dispositivos más pequeños, capaces de realizar la mayoría de las funciones de un PC de escritorio.
Pero las tendencias, más que a una reducción del tamaño de las pantallas, apuntan hacia una diversificación y especialización de los dispositivos.
Los denominados Tablet PC, con más de 10 años de presencia en el mercado, no lograron masificarse porque se trataba de computadores portátiles poderosos, la mayoría con sistema operativo Windows, pero pesados para ser manipulados como libretas y demasiado costosos para el valor agregado que ofrecían.
La generación emergente de las tablets, impulsada por la iPad de Apple 3 millones vendidas en 80 días, representa una fusión de los lectores digitales o e-readers con las netbooks, especialmente por la elección de las características que debe tener el producto final, y por el estilo de interfaz o de interacción con el dispositivo.
Un lector de libros electrónicos, como el eBook de Sony o el Kindle de Amazon, es un dispositivo especializado que nunca estuvo pensado como computador portátil. Su mérito mayor, aparte de almacenar muchos libros, es el despliegue del texto, que permite una lectura más cómoda que la que puede hacerse en computadores portátiles o celulares.
Los netbooks, por otra parte, demostraron que era posible vender computadores con menos poder de cómputo, algo que iba en contra de la tendencia según la cual todo computador nuevo debía ser más poderoso que el anterior si se concentraba en ciertas funciones básicas de navegación y productividad.
La muerte del ratón.
Lo primero que se desprende de la interfaz del iPad es la ausencia de teclado físico y de ratón. Un teclado virtual más grande permite introducir texto más rápido y con menos posibilidades de error, aunque el teclado físico opcional es realmente necesario si se presenta una tarea intensiva de transcripción.
Pero en el caso del ratón las tablets parecen condenar al apuntador a una muerte segura; es más rápido y natural seleccionar y apuntar con los dedos que mediante un ratón.
Hay que recordar también que las pantallas táctiles se ven con mayor frecuencia sobre los escritorios, donde el teclado tiene más chance de sobrevivir que el noble y obediente ratón.
Tablets al mayor.
Esta semana, en la reunión anual que realiza Microsoft con sus socios de negocios, compañías integradoras y desarrolladoras de “software” de todo el mundo, esa corporación dejó claro que las tablets tienen una alta prioridad en los productos programados para este año.
Microsoft contará con Windows 7, sistema operativo diseñado para trabajar con las netbooks, que se acoplará sin problemas a una tablet con pantalla táctil, y en conjunto con HP, Dell, Lenovo y otros fabricantes que ya han esbozado planes apegados al nuevo formato. La mayoría de estos fa bricantes usarán procesadores Intel.
Dell liberó en Inglaterra una tablet de 7 pulgadas sin asociarse con Microsoft o Intel, pues escogió el Android el mismo de los recientes smartphones táctiles liberados por Motorola, Samsung, Sony Ericsson y otros como sistema operativo y el procesador Arm.
La incógnita de esta tablet de Dell es si la pantalla de 7 pulgadas, un tanto reducida si pensamos en las tareas típicas de un iPad, es intencional o si se trata de una limitación del sistema Android.
Tanto los tablets que auspicia Microsoft como los que impulsará Google integrarán para finales de año una variada oferta para los consumidores en el área de un computador complementario para entretenimiento, libros y publicaciones electrónicas.