11/02/2011. Evento IGNITE en el Jazz Caf de Escaz, presentacin de videos de corta duracin relatando historias, proyectos de personas comunes y de algunos personajes, Ricardo Destarac, Fundador y Director de la Fundacin Do Good. Foto Abelardo Fonseca (Abelardo Fonseca)
Doce personas y cinco minutos para que cada una de ellas los inviertan hablando sobre lo que quieran –cualquier cosa– con ayuda de 20 filminas. Eso es el Ignite.
Esas 12 personas se multiplican hasta llegar a ser 10.000, en más de cien ciudades de 50 países, en un evento que pretende compartir información con rapidez, “porque todos tenemos algo qué decir a los otros”.
¿De qué hablaría usted si le ofrecieran esos cinco minutos frente a un auditorio repleto de gente ávida de información?
Maybelline Temple, quien hace dos meses brincó a la escena pública tras el incendio de su casa, en Ipís, utilizó sus cinco minutos de fama, la noche del viernes 11 de febrero en el Jazz Café Escazú, para compartir con los asistentes las bases de su fe en Dios.
En diciembre, cuando su vivienda recién pintada terminó hecha cenizas, salió a la calle con lo único que tenía puesto. Y aunque eso “no prometía”, dio gracias a Dios por permitirle vivir para estar ahí, ahora, esa noche.
Maybelline, la hoy reconocida
Esta actividad lleva cinco años de rodar por el mundo. La semana del 7 al 11 de febrero, se realizaron 50 Ignites en cien ciudades y estas enlazaron a más de 10.000 “detonantes” de información. Entre ellos, los 11 ticos –originalmente eran 12 los convocados– que se apuntaron.
Ignite Costa Rica es parte de Global Ignite Week, como también lo es el Ignite en Amsterdam (Holanda), Bangkok (Tailandia), Dublín (Irlanda), y Nueva York, Pensacola y Phoenix (Estados Unidos), entre otros sitios.
Entre los 11 participantes ticos, hubo empresarios (José Coto, Carolina Villavicencio, Ricardo Destarac y Debbie Aizenman). También llegaron personajes muy conocidos (Maybelline Temple –
Tampoco faltaron promotores sociales (José Aguilar, de la Fundación Acción Joven). Aunque estaba invitado el alcalde de San José, Johnny Araya, al final se disculpó por no presentar “su debate contra él mismo”, debido a una migraña de última hora.
“Nos incorporamos a un movimiento mundial para hacer la diferencia. Ya no somos lo que tenemos, sino lo que compartimos. Hoy, contamos con 11 ‘detonantes’ de extraordinarias ideas, experiencias y proyectos, sin presentaciones ni fanfarrias. Solo
Cierto. Sin mayores fanfarrias, el evento empezó –como casi todo en este país–, con más de una hora de atraso, pasadas las 7 de la noche.
José Coto abrió la segunda temporada. En sus cinco minutos y 20 filminas, se describió “como un emprendedor con amplio entendimiento de la era digital”.
Su tiempo le sirvió para aconsejar al público sobre los pasos para llevar al éxito una idea, desde su germinación hasta concretarla en un proyecto con posibilidades de éxito. Principalmente, validar el potencial de triunfo de la idea antes de ponerla a rodar.
Sin mayor tiempo para un respiro, 15 segundos después de haber finalizado Coto, Carolina Villavicencio subió al escenario y contó por qué dejó su exitosa carrera como ejecutiva de cuentas en una agencia de publicidad para cumplir el sueño que ahora vive: ser propietaria de Florentina.
En la pantalla, las imágenes fluían mientras presentaban una floristería muy
La drástica reducción de la deserción colegial en un centro educativo de San José acosado por la violencia, fue expuesta por José Aguilar, fundador y director de la Fundación Acción Joven.
Sacando pecho del orgullo, este psicólogo de profesión cree que aquellos adolescentes con menores posibilidades de salir adelante encierran un enorme potencial como seres humanos, si tan solo tienen una oportunidad.
Muy cerca del escenario, la gente no lo perdía vista, como si pensaran, “sí, tal vez, ¿por qué no darles un chance?”
Michelle Fuster no solo impresionó por la calidad de su presentación, sino también por su capacidad pulmonar. Prácticamente, no hizo ningún “punto y coma” y menos un “punto y aparte” en toda su intervención para defender la necesidad de que la gente reconozca los méritos por lo que son y no por su origen, nacionalidad o ideología. Ella sí que le sacó provecho a esos cinco minutos de comunicación.
Todos los participantes ticos hicieron su aporte: una hora, sumando todas las intervenciones.
¡Deberían llevar el Ignite al Congreso, a ver si algunos diputados siguen el modelo de ir al grano y aportar ideas valiosas sin tanta palabrería y pérdida de tiempo!
Toda esta lluvia de información fue compartida con el mundo entero y se puede conocer en detalle en la dirección www.ignitecostarica.com