San José (Redacción). José Antonio Lobo Solera, el exdirectivo del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), quien además fue el testigo clave de la Fiscalía en el caso ICE-Alcatel, se mostró cauteloso tras la absolutoria que dictó ayer el Tribunal de Apelación de Sentencia Penal a favor de los ocho condenados.
El testimonio de Lobo, de 64 años, sirvió para declarar en contra del expresidente Miguel Ángel Rodríguez, Édgar Valverde Acosta (expresidente de Alcatel-Costa Rica) y el empresario Alfonso Guardia Mora.
Esta mañana, el exdirectivo dijo a La Nación vía teléfono que desconoce los detalles del fallo y tampoco lo ha analizado, por lo que prefiere guardar cautela.
“Poco puedo señalar yo. En realidad no conozco el fallo. ¿Qué podría aportar yo? Yo no puedo comentar decisiones jurídicas de instituciones a las cuales yo respeto mucho, que son las instuituciones del sistema judicial costarricense”, afirmó.
El testigo clave explicó que durante un “largo y penoso proceso” de ocho años no ha acudido a los medios para externar opiniones. “Yo he tratado de tener una actitud respetuosa y mantener en el ámbito privado mis criterios, mis opiniones”, añadió.
Sobre la posibilidad de que el expresidente Miguel Ángel plantee una demanda en su contra, respondió: “Durante casi 30 años de mi vida yo seguí instrucciones de don Miguel Ángel. Diay yo no soy quién para darle instrucciones de que me demande o no me demande”.