Una parte del gremio de los diplomáticos levantó su voz contra los jerarcas de la Cancillería por la decisión de frenar la ocupación de unas 20 plazas en sedes costarricenses en el exterior.
El canciller René Castro fue cuestionado por haber “bajado del avión” a profesionales recomendados por una comisión calificadora en el concurso interno 007-11. Así lo señalaron varios funcionarios en el sitio de
Ese grupo acusó a Castro y al vicecanciller Carlos Roverssi de querer ocupar esos espacios con allegados ajenos a la Cancillería.
Castro está fuera del país y Roverssi no se ocupa de los asuntos administrativos. Sin embargo, la vicecanciller Marta Núñez atribuyó anoche a la “precipitación y a la desinformación” las acusaciones.
“Eso no es como ellos dicen. Se decidió no pasar todavía de las designaciones a los nombramientos, pero es porque aún no estamos seguros de poder disponer de esas plazas por razones presupuestarias”, contestó Núñez.
Ella se refirió a una directriz de la presidenta Laura Chinchilla para reducir el gasto público. La mandataria ordenó no ocupar las plazas vacantes en los ministerios y solo estableció una excepción para los maestros y los policías. Así lo explicó Núñez en el memorando DVMA- 250-2011, del jueves 3 de marzo.
“Yo misma les expliqué que evitamos hacer el nombramiento porque las plazas podrían quedar congeladas por Hacienda. Ahora estamos en conversaciones con la Autoridad Presupuestaria para ver si podemos hacer uso de esas plazas”, contestó la Vicecanciller.
Sin embargo, el memorando DVMA-250-2011 da cuenta de que sí se nombró a cuatro personas: Roxana Pacheco en Ginebra, Óscar Camacho y Carolina Molina en Houston, y Ana Elena Pinto en Italia.
Este concurso abrió la posibilidad de postularse para 20 plazas en sedes como la ONU, México, el consulado en Nueva York y el de Atlanta. Se produjo una alta participación de diplomáticos y solo hubo pocos cupos que no interesaron a nadie, según Núñez.
Se refirió a los cargos de cónsul en La Habana y de consejero en Seúl, Tokio y Nueva Delhi.
Eso significa que la mayoría de las plazas quedarán en manos de diplomáticos de carrera, aunque estos temen que los nombramientos se hagan “a dedo”, mediante criterios de afinidad política, a favor de personas externas.
“René Castro y Carlos Roverssi son políticos de paso, pero los diplomáticos de carrera somos permanentes; por esto reclamamos respeto por el Servicio Exterior”, se lee en el texto, respaldado por comentarios de algunos diplomáticos.
Este asunto ya ha sido señalado en meses recientes por la Asociación de Diplomáticos de Carrera. Su presidente, Javier Sancho, dijo anoche estar analizando el concurso 007-11. “Lo vemos con preocupación y estaremos fijando una posición oportunamente”, anunció.