Lílliam Gómez, exfiscala general interina, aseguró ayer ante la “comisión Arias” del Congreso que si hubiera continuado como jerarca de la Fiscalía, el exministro de la Presidencia, Rodrigo Arias Sánchez, ya habría sido indagado por el Ministerio Público.
La exfuncionaria afirmó ante los diputados que existen motivos suficientes para investigar a Arias por el manejo de $2 millones donados por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) en el 2007 y el 2008, tema central de la investigación en ese foro legislativo.
En su primera intervención, de 20 minutos, Gómez manifestó que el 8 de octubre del 2010, cuando estaba a ocho días de dejar su cargo, se reunió con el fiscal en ejercicio, Jorge Chavarría, quien le pidió detener la indagatoria para conocer el caso con mayor detalle.
“Don Jorge me solicita, pide, comenta: ‘Doña Lílliam a mí me gustaría conocer el caso, estudiarlo, saber qué es lo que hay y luego determino cuándo se hacen las indagatorias”, relató la exfuncionaria.
Según Gómez, accedió a esta petición como una “cuestión de mera solidaridad” con Chavarría quien estaba a poco tiempo de estrenar la silla como fiscal general.
Fue en ese momento cuando le recalcó que ya existían las pruebas suficientes para llevar a cabo la pesquisa contra Arias.
“Le indiqué que ya habían motivos suficientes para realizar la indagatoria”, agregó Gómez, quien aceptó frenar la pesquisa.
No obstante, seis meses después de asumir, Chavarría aún no ordena que se efectúe la investigación.
El encuentro, según Gómez, se hizo por insistencia suya, al igual que otras dos reuniones que Chavarría canceló anteriormente.
“Fui yo quien lo citó en dos ocasiones, hasta la tercera fue que don Jorge llegó a la reunión sumamente en carrera”, dijo Gómez.
Gómez destacó que en un correo electrónico le pidió a Emilia Navas, fiscala adjunta de Delitos Económicos, continuar con la investigación de la causa y reprogramar las diligencias con el nuevo jerarca.
Estas disposiciones surgieron como respuesta a una solicitud de Navas sobre “reconsiderar su decisión de suspender la diligencia de intimación de hechos al imputado Rodrigo Arias Sánchez”.
Tras los cuestionamientos de los diputados, Gómez calificó de “coincidencias” todos los hechos que se llevaron a cabo el 8 de octubre cuando mantuvo la reunión con el actual fiscal.
Ese mismo día, Arias recibió la notificación para la indagatoria y supuestamente consultó por teléfono sobre la cita al ministro de Seguridad, José María Tijerino.