Así como los habitantes de una región pueden reconocerse por su acento particular, la especie de aves conocida popularmente como el pájaro campana ( Procnias tricarunculatus ) cambia su canto según la zona en la que viva.
Dicha afirmación es el resultado de 12 años de investigación del ornitólogo tico Julio Sánchez, y fue dada a conocer en el marco del III Congreso de Ornitología de la Universidad de Costa Rica.
El científico relató que el campana no suena como tal y que más bien el sonido que emite es como una especie de ‘ boinj ’ que cambia rítmica y melódicamente para diferenciar al menos tres “dialectos”: uno de la población de Talamanca, otro de las aves de Monteverde y, finalmente, las de Nicaragua.
Según Sánchez, al igual que los niños aprenden a hablar con ayuda de los adultos, el “dialecto” de esta especie de aves es “un canto aprendido, en donde los pájaros más jóvenes se acercan a los ‘más viejos’ para aprenderlo de ellos”.
Sánchez destacó que este aprendizaje se da en los primeros siete años de vida de los animales.
Se encontró también que esta especie de ave tiene la capacidad de modificar su canto a lo largo de su vida. Ellos, además, son capaces de rastrear el canto de otros machos. Esto último es un factor de competencia por las hembras.
En riesgo. En la ponencia, denominada “Conservación y comportamiento del pájaro campana”, Sánchez destacó que la especie está en riesgo debido a la deforestación que enfrenta su hábitat.
Como solución a este problema, varias organizaciones trabajan en un proyecto de conservación en Monteverde, que busca crear un corredor biológico para facilitar su tránsito desde el Parque Nacional Arenal hasta la desembocadura del río Abangares, en Guanacaste.
“Esta es una iniciativa que implica un proceso de reforestación en las comunidades”, añadió el ornitólogo Julio Sánchez.