El niño precoz del requinto

Unos dicen que el encuentro entre Mario Chacón y Pablo Peñaranda ocurrió en la desaparecida Soda Palace; otros, que fue en el Bar Ballestero, todavía abierto en el norte de San José. Chacón tendría 38 años, y Peñaranda tan solo 17. Lo cierto es que entonces se formó una de las más productivas sociedades musicales de Costa Rica. Es muy posible que ambos se conocieran en 1949 puesto que Mario Chacón estuvo todo el año 48 en La Habana, Cuba, donde se fue con su Cuadro Buenos Aires mientras se calmaban los sucesos relacionados con la nefasta revolución de aquel año. Es mucho más factible que el encuentro se produjese en la Soda Palace, adonde Chacón asistía con frecuencia.

Guitarrista precoz. Pablo Peñaranda nació en Alajuela, el 17 de diciembre de 1932. Sus padres fueron Ángela Hernández López y Jesús Rafael Peñaranda Jiménez. La madre cantaba en el hogar y el padre tocaba la guitarra. De allí viene la inclinación musical de Pablo, quien primero dominó la mandolina y después la guitarra. En este aspecto de aprendizaje, su formación fue totalmente autodidacta.

Hacia 1940, con solo 8 años, Pablo formó un dúo con su hermano mayor, Dulce Nombre. La familia se había trasladado de Alajuela a San José, a un caserío ubicado donde hoy está la Cruz Roja, cerca del barrio Santa Lucía. Posteriormente se mudó a Guadalupe y finalmente a Cinco Esquinas de Tibás. Pablo cursó estudios primarios en la escuela Pilar Jiménez, de Guadalupe, pero no los concluyó.

El dúo de los hermanos Peñaranda se movía por el centro de la capital tocando en establecimientos comerciales. Tal sería la destreza de Pablo que de inmediato impresionó a Mario Chacón, quien lo contrató para formar el trío Los Ticos, junto con el cantante Francisco Paco Brenes.

Al desaparecer el dúo de los hermanos Peñaranda, el mayor, Dulce Nombre, se alejó totalmente de la música, en tanto que Pablo inició su meteórica carrera como guitarrista y más tarde como requinto.

El trío Los Ticos comenzó sus presentaciones en las radioemisoras de la capital. En Radio Athenea, propiedad de don Rogelio Sotela, se presentaba en los programas que se transmitían en vivo. Esta emisora estaba ubicada en los alrededores de la Clínica Bíblica. El grupo también actuaba en La Voz de la Víctor (radioemisora instalada 100 metros al sur de la catedral metropolitana) con la animación del recordado Rodrigo Sánchez.

A finales de los años 40 se realizaron las primeras giras al exterior del trío, para lo cual fue necesario que Pablo tramitase el permiso respectivo pues era menor de edad. A esa altura ya estaba totalmente dedicado a la música. Entonces también se iniciaba la incorporación del requinto a los grupos de guitarra, lo que favoreció las habilidades naturales de Pablo con aquel instrumento.

En esa fructífera etapa, el trío Los Ticos grabó varios temas de Mario Chacón, convertidos ya en páginas inmortales del cancionero popular costarricense. De esa época son Ticas lindas, Caballito nicoyano, Así es mi tierra, Mi novia linda y otras. Estas grabaciones se realizaron para el sello América.

Con la salida del cantante Francisco Brenes, al trío Los Ticos se incorporó Ronald Alfaro, quien le dio el timbre definitivo. Pablo Peñaranda se mantuvo en el trío hasta 1960; posteriormente, durante los años 70, formó el trío Los Millonarios con Talí y Alexis Gamboa. Lalo Rojas también participó para grabar un disco de larga duración con la cantante Julita Cortés.

En La Esmeralda. El café, bar y restaurante La Esmeralda comenzó en la calle Central, entre las avenidas Central y Segunda. Posteriormente tuvo su época de gloria en la avenida Segunda, al costado norte de la Catedral. Su última ubicación estuvo unas cuadras al este sobre esa avenida, frente a la Caja Costarricense de Seguro Social.

En ese local, propiedad de don Emilio Araujo, se reunían los cantantes, guitarristas y mariachis de la capital para llevar serenatas bajo contrato. Pablo Peñaranda se ubicó en La Esmeralda y formó un trío con su hermano menor, Juan Carlos, también destacado guitarrista, y el cantante Claudio Vargas. Este grupo se llamó Los Diplomáticos y dató de 1978.

Otros requintistas destacados que acudían a La Esmeralda fueron: Wincho Porras, José Antonio Santamaría, Marcos Díaz (del trío Los Brillantes) y Juan Carlos Peñaranda. Franco Fonseca se destacó en el trío Los Josefinos, José Córdoba en el trío Alma de América, y Lalo Rojas en varias agrupaciones.

Otros artistas, compañeros de Pablo Peñaranda, pasaron por La Esmeralda participando en diversos grupos de guitarras: Juan Rivera, Bernardo Chona Calvo, Ulises Quirós, el Zurdo Rivera, Mario Romero, Felipe Hernández (Seis Dedos ), Carlos Guzmán y Francisco Loría, entre otros.

En alguna ocasión, en México, durante una presentación del trío Los Ticos, los integrantes del famoso terceto mexicano Los Diamantes manifestaron, al percusionista nacional Óscar Coca Piedra, su admiración por la calidad guitarrística de Pablo, intérprete del requinto que se formó sin orientación académica. Pablo Peñaranda no se casó, pero tuvo una hija de nombre Sandra, quien en este momento ronda los 62 años. Peñaranda falleció en San José el 16 de enero de 1991 víctima de un cáncer gástrico cuando tenía 58 años de edad.

El autor es investigador musical y director de un programa de música popular que se transmite por Radio Nacional los domingos a las 8 p. m.