En el océano Pacífico mexicano cayó ayer la primera cápsula espacial privada tras una visita de reabastecimiento a la Estación Espacial Internacional (ISS).
La aeronave es la Dragon , desarrollada por la compañía Space Exploration Technologies Corp (SpaceX), con sede en California, Estados Unidos.
“El vehículo de carga no tripulado fue sostenido por un paracaídas hasta posarse sobre el océano Pacífico, seis horas después de partir de la ISS. Trajo consigo casi 635 kilos de equipo viejo”, informó AP.
Dragon mide 4,4 metros de alto y tiene un diámetro de 3,66 metros. Es de color blanco y tiene dos alas de paneles solares que, extendidos, dan una envergadura de 16 metros.
“¡Amaraje exitoso!”, celebró el presidente de SpaceX, Elon Musk, en un mensaje en Twitter después de que la cápsula cayó en el Pacífico. Mientras, una flotilla de barcos la recibía en el lugar.
Ahora pasarán varios días para que sea posible trasladar la cápsula hasta Los Ángeles, desde donde será llevada por tierra (en camión) hasta SpaceX en Houston, Texas.
Con este amaraje se inició un nuevo capítulo en la historia de la exploración espacial, en el que las operaciones de abastecimiento de la ISS quedan en manos del sector privado y no solo de Gobiernos.