El diputado cartaginés del Partido Acción Ciudadana (PAC) Víctor Hernández evidenció ayer su desilusión al ver a su equipo perder el campeonato el sábado anterior.
El congresista, quien achaca la caída del Club Sport Cartaginés ante Herediano al árbitro del encuentro, Randall Poveda , hizo algo más que reclamar.
En la sesión del plenario, Hernández tomó el micrófono y, durante seis minutos, en su espacio de control político, pidió la renuncia del árbitro Poveda.
¿Sus razones? “Los diputados somos representantes del pueblo. Hice este acto para hacer una manifestación pública. Yo soy la voz del pueblo”, expresó Hernández.
Verbo encendido. El diputado cartaginés lamentó perder los chicharrones que su familia preparó para celebrar el idílico cuarto campeonato del Cartaginés. “Invité al árbitro a que renunciara, porque esto raya en la corrupción”, manifestó en el plenario.
Hernández señaló que las dos acciones mal arbitradas fueron la del codazo del herediano Ismael Gómez a Carlos Johnson y la falta del cartaginés José Villalobos Chan, que terminó en expulsión.
La declaración de Hernández no encontró eco en ninguna otra fracción, aunque uno de los diputados liberacionistas, Víctor Hugo Víquez, es dirigente del Herediano.
Víquez estuvo ausente del plenario pues está de viaje por China.
Ayer se intentó localizar a Poveda ; sin embargo, no respondió las llamadas hechas a su teléfono celular. Rodolfo Villalobos, presidente de la Comisión de Arbitraje, salió del país ayer, por lo que fue imposible obtener un criterio suyo sobre la posición del legislador.