Los Ángeles, EE.UU. (AFP). Un día después de la gala de los Óscar en Hollywood , los críticos atacaron al anfitrión Seth MacFarlane por sus "bufonadas cruelmente sexistas" y por hacerse eco de "ofensivos" estereotipos judíos.
Otros dijeron que el creador de "Padre de familia", a quien los organizadores de los Óscar convocaron como anfitrión con el fin de atraer a un público joven, fue aburrido
Y justamente eso era lo que no querían los organizadores, que se habían propuesto eliminar las partes más tediosas de la ceremonia para hacerla lo más entretenida posible
"Bien, pues no funcionó", escribió al respecto el crítico de televisión del diario local Los Angeles Times, en una nota a toda página sobre el show de tres horas de la entrega de los Premios de la Academia el domingo.
"Fue largo, autocomplaciente y aburrido, incluso para los estándares de aburrimiento del programa", escribió.
"Ver los Óscar anoche significaba sentarse a pasar por una serie de bufonadas cruelmente sexistas dirigidas por un sucio y autocomplaciente Seth MacFarlane", escribió el New Yorker.
"Eso podía haber sido ya bastante aburrido. Pero la misoginia de la noche involucró una hostilidad específica hacia las mujeres en su lugar de trabajo. Fue poco agradable y amargo".
También un segmento con el oso de peluche Ted, protagonista del filme homónimo de McFarlane, provocó severas críticas. El osito apareció junto a su colega de reparto Mark Wahlberg e hizo una serie de chistes sobre tener sexo con miembros de la audiencia y una orgía que tendría lugar en la mansión de Jack Nicholson.
Luego bromeó sobre el supuesto control de los judíos en la industria del cine estadounidense al decir que su verdadero nombre es Theodore Shapiro. Luego añadió: "Quiero donar dinero a Israel y continuar trabajando en Hollywood por siempre".
El grupo judío Liga Antidifamación (ADL) criticó estos chistes al considerarlos "ofensivos y ni remotamente divertidos", en un comunicado del director de la ADL en Estados Unidos, Abraham H. Foxman.